Exportadora de Sal en Guerrero Negro

• La salinera más grande de México y del mundo
• Buscan llegar la producción de 10 millones de toneladas
• Genera empleos permanentes para mil 500 trabajadores 
• Operada por Mitsubishi comparte propiedad con federación 

Por César Villalobos López

A más de 40  años de visitar Guerrero Negro, en el municipio de Mulegé, donde inicia el estado de Baja California Sur, a unos pasos del paralelo 28, donde colinda con el estado de Baja California, regresamos, a este lugar, con gran atractivo turístico.

La principal atracción para los visitantes, nacionales y extranjeros, es el avistamiento de la ballena gris, y la aventura de transitar por largos caminos, dentro de las instalaciones de la Exportadora de Sal, muy amplios y perfectamente compactados y que, para los mexicalenses, resultan una envidia, ante las calles que tenemos, llenas de baches.   

Cuando hice los primeros comentarios sobre el viaje en automóvil, fui cuestionado por la distancia y la inseguridad, pero como el año anterior había recorrido la carretera de Mexicali a Bahía de Los Ángeles, pasando por San Felipe, Puertecitos, Alfonsinas y una serie de lugares de la costa del golfo o mar de Cortez, con hermosos paisajes, nos fuimos a Guerrero Negro.

Además de los bellos paisajes de la costa, más adelante llegamos al valle de Los Sirios, pero no todo fue alegría, nuestra primera decepción, al llegar al entronque de Laguna Chapala con la carretera transpeninsular, donde nos encontramos con la novedad de que un pequeño y agradable restaurante, donde el 2022 degustamos de un desayuno a base de machaca de jaiba, estaba cerrado y el inmueble afectado por el vandalismo.

Por fortuna, antes, al pasar por La Ventana, habíamos degustado sabrosos burritos de machaca a base de carne deshebrada, hechos en casa, con ricas tortillas de harina.

Ya en la transpeninsular, después del ejido Villa Jesús María, el tenue nublado que nos había acompañado, protegiéndonos del sol, se volvió gris y el Dios Tláloc hizo de las suyas con una ligera, pero molesta lluvia, sin afectar nuestro viaje; en ese momento, Francisco tripulaba el vehículo y más adelante tuvo que responder a un vacilante interrogatorio, en un retén con elementos de la Guardia Nacional. 

Para cruzar a Baja California Sur pasamos por lo que seria una escuela normal, ahora convertida en cuartel de la Guardia Nacional o del Ejercito Nacional y la lluvia había quedado atrás.

El sábado 18, el día amaneció con un clima esplendido, después del desayuno en el restaurante del hotel TerraSal, Enrique Winkler nos confirmó que estaba confirmado el espacio para el avistamiento de ballenas y para una visita a la Exportadora de Sal, ahora operada por la empresa japonesa Mitsubishi, poseedora del 49 por ciento de las acciones, el 51 restante en manos del gobierno federal.    

A las 10:30 de la mañana, una camioneta tipo van llegó por nosotros a la puerta del hotel. De ahí, al embarcadero, donde abordamos una lancha, no sin antes colocarnos chalecos salvavidas e iniciamos la aventura por la Laguna Ojo de Liebre, escuchando relatos históricos de Lucio, el operador de la lancha. De esto escribiremos después.

Al concluir el recorrido, la visita al campo de producción e instalaciones de la Exportadora de Sal, llamando la atención los nidos, hábitat de las águilas pescadoras.

Nuestro guía, Arturo Moran, de Laguna Tours en la primera explicación nos hace énfasis que deberíamos seguir siempre sus instrucciones y tomar muchas fotos del blanco paisaje contrastando con el verdoso de las aguas salinas que, al evaporarse, dejan la materia prima.

Durante el recorrido observamos distintos procesos o pasos, desde que se almacena el agua salada, hasta que se inicia la cosecha, utilizando moto conformadoras que hacen el trabajo similar a un rastrillo de forraje, pero en lugar de hacer pacas, la sal acumulada se bombea a enormes camiones llamados Darts, con enorme capacidad y enormes llantas, diseñados especialmente para esta actividad, teniendo una capacidad para transportar 260 toneladas de sal.

Las enormes llantas de los Dart superan los tres metros de altura y otro tanto de anchura.  Todo el equipo de transporte y maquinaria utilizada aquí, requiere de un exhaustivo mantenimiento para evitar su rápido deterioro y utilizarla por varios años. 

Nos explican que el agua de mar, obtenida de Laguna Ojo de Liebre, con un alto contenido salino, la topografía del selo donde se hacen los embalses de agua, los candentes rayos del sol y los vientos con factores determinantes para las cosechas de sal, aclarando que la extracción por evaporación, se hace en muchas otras partes del mundo.

Exportadora de Sal busca llegar a la producción y exportación de unos 10 millones de toneladas obtenidas gracias a la tecnología aplicada y al esfuerzo de mil 500 trabajadores que laboran ruante los 365 días del año.

Los nidos de las águilas pescadoras se encuentran a lo largo de los caminos, pero además existe un santuario donde año con año llegan alrededor de 150 mil aves, generando un maravilloso espectáculo. 

Al final del recorrido en el campo de producción de Exportadora de Sal esta la plata de lavado, donde el blanco producto se clasifica y se almacena a cielo abierto o se bombea hacia las barcazas que la transportan a Isla de Cedros para ser cargada en buques de gran capacidad, para llevarla a infinidad de puertos en el mundo.  

Hacemos nuestra última parada en la salinera, la planta de lavado. En la planta, la sal se lava, se clasifica y se embarca en barcos especiales que la llevan a la Isla de Cedros desde donde se exporta a diferentes partes del mundo.

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