Semanario El Pionero

Expresión de Mexicali y su Valle

Entre Los Surcos…

… Por lo más delgado

Por César Villalobos López

Ahora resulta que el personal de la Dirección Local de la Comisión Nacional del Agua, en Chihuahua, pagará los platos rotos por los sucesos ocurridos, como la toma de las instalaciones en la presa “La Boquilla”, por campesinos.

En opinión de los inconformes con el manejo del agua, -ordenado de las oficinas centrales- consideraron que la entrega a los Estados Unidos les dejaría desprotegidos para las siembras de este ciclo.

Desconocemos hasta donde les esté, o les afectará, la baja de los niveles en “La Boquilla” y otras presas, pero, por lo pronto, el gobierno de México presume que cumplió con el Tratado Internacional de Límites y Aguas firmado con los Estados Unidos en 1944.

Aquí podríamos considerar aquello de “candil de la calle, obscuridad en tu casa” y es que el Tratado establece condiciones operativas en cuanto a las entregas de volúmenes, en este caso de México a Estados Unidos, incluyendo aspectos imponderables por falta de lluvias u otros fenómenos naturales.        

Pero lejos de un dialogo informativo de los altos y noveles funcionarios de la Conagua, posiblemente con mucho conocimiento técnico, pero mucha soberbia, recurrieron a aquello de “cartucheras al cañón, quepan o no quepan”. 

Por separado, el presidente López Obrador se subió al ring, arremetiendo contras los directivos de agrupaciones, alcaldes y gobernador de Chihuahua, asegurando que se trataba de un movimiento político. 

A los funcionarios de la Conagua y de la Comisión Internacional de Límites y Aguas, después de la versión del presidente de la república, apechugaron y se sumieron en profundo silencio, porque “la voz del amo” es la única verdad, pero que los muchos tengan “otros datos”.

Ahora, la Conagua solicitó la “renuncia voluntaria” de 43 de sus mandos medios de la Dirección Local Chihuahua, adjudicándoles actos de corrupción al incumplir con el Tratado Internacional de Agua en septiembre pasado, cuando agricultores se apoderaron de las instalaciones de la presa La Boquilla.

Así las autoridades decidieron no dar ni las gracias al personal de la Conagua argumentando que “no lo merecían al no haber acatado las ordenes giradas a nivel central aun y cuando muchas de las áreas no tiene que ver con la ejecución del Tratado”, se quejaron los trabajadores.

Se sabe que 40 de los despedidos fueron emplazados para firmar el documento, bajo la amenaza de no hacerlo buscarán elementos para fincarles responsabilidades administrativas y hasta penales, pero en ninguno de los casos En todos los casos se considera el pago de indemnizaciones por los años trabajados.

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