Semanario El Pionero

Expresión de Mexicali y su Valle

Lo extraordinario de lo cotidiano…

El gozo de crear

Por Gladys Villalobos*

“La creatividad no se gasta. Cuanta más usas, más tienes” Maya Angelou, escritora estadounidense.  

Recientemente, he escuchado la frase: “hacer haciendo… la única forma de hacer es haciendo”. Me gusta leer o participar en foros sobre emprender una idea, el arte de crear, cómo ofrecer mis productos, servicios o habilidades al mundo. “Sacar mis talentos al sol” digo yo.

Coinciden que una de las formas de avanzar en un proyecto es “haciendo”: probar, practicar, hacer, decidir, sentir, hacer, deshacer, retomar, hacer y seguir haciendo.

Este mes cumplo tres años de presentar al mundo mi proyecto de macramé, Amakra Macramé. La experiencia me ha resultado un regalo. He aprendido de mí. He ejercitado la paciencia, he retomado las matemáticas y trabajar mi sentido de peso y dimensiones que siempre me ha resultado una debilidad.

Aun cuando ya vivía la experiencia de escribir, crear con las palabras; de crear una imagen con un lente a través de uno de mis hobbies que es la fotografía, el gozo de diseñar y crear a través de nudos ha enriquecido mi forma de vivirme, ha estimulado mi inquietud por ampliar mis posibilidades de ser y hacer. Entendí y viví la palabra “artesana”. 

El macramé me ha resultado un maestro, lleno de analogías de vida. Una de ellas, trabajar en el equilibrio de la suave firmeza; aprender a mediar la fuerza para obtener el resultado deseado, sin asfixiar (el nudo y la vida) o soltar demasiado y con ello, perder la armonía en un diseño y en la cotidianidad. Una analogía de la forma como nos relacionamos con nosotros mismos y con los demás. Relacionarnos en la justa y necesaria medida.

También observe el valor de lo imperfecto. Al principio me generaba ansiedad la asimetría, después me resulto audaz. Romper mis propios patrones o esquemas de lo “bien hecho”. Abracé el wabi sabi.

A ti, gracias por ser parte de este proyecto, por tu apoyo, por tu compra, por tus porras, por asistir a mis talleres, por confiar en mis conocimientos, por confiar en mi trabajo, por tus pedidos a la distancia, por tus bonitas palabras. 

Gracias Madre por ser una fuente infinita de inspiración para mí y por esa caja con materiales que me dejaste guardada. Gracias Padre por dejarme llenar tu casa de maceteros para practicar y siempre tener palabras alentadoras para mí. Gracias Luis por tu apoyo, tus amorosos consejos, tus horas invertidas en cada detalle y por ese letrero que ronda tu mente.

“Lo Extraordinario de lo Cotidiano”, un espacio donde cada día es un motivo. A ti que me lees, valoro tu tiempo. 

*Cachanilla de nacimiento, comunicóloga de profesión, amante del cuerpo por vocación. Crecí análoga, me convertí digital. Asesora en Comunicación, Redactora de Contenidos, Fotógrafa. Mi sitio: gladysvillalobos.wordpress.com/ 

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