El gobierno de EU rechazó colaborar en una investigación con el gobierno mexicano, lo que fortalece la posibilidad de una disputa comercial
AP
El gobierno de Joe Biden rechazó participar en una investigación junto al gobierno mexicano sobre el maíz transgénico, por lo que continuará en el litigio comercial sobre este tema, en medio de un escenario electoral cada vez más apretado para los demócratas.
El subsecretario de Agricultura, Víctor Suárez, confirmó a la agencia Reuters que el país obtuvo una negativa ante la petición de realizar dicha investigación conjunta, que buscaría ofrecer datos sobre los impactos en la salud animal y humana del consumo de este producto.
«Ellos deciden qué necesitamos producir en México y qué necesitamos comer en México; eso es soberbia», consideró. «¿Su ciencia es palabra de Dios? Eso no es ciencia, eso es ideología», alegó el funcionario.
Fue el pasado marzo que Estados Unidos solicitó consultas técnicas en el marco del T-MEC luego del decreto del gobierno de López Obrador para prohibir el uso del maíz transgénico. López Obrador, por su parte, se mostró despreocupado ante la posibilidad de llegar a un panel por este tema, asegurando que no hay ninguna violación al acuerdo trilateral y defendiendo que es un tema de salud.
En ese sentido, propuso que se hiciera una investigación conjunta, confiado de que se resolverá los daños que puede traer para la salud el consumo del maíz transgénico, petición que finalmente fue rechazada. Y a pesar de los argumentos del presidente, el gobierno de Canadá también se unió a las quejas.
Para Biden el tema se complejiza de miras a la carrera presidencial de 2024, en un contexto donde las encuestas más recientes revelan un empate entre el actual mandatario y el republicano Donald Trump -que se posiciona como el candidato favorito por este partido-: el demócrata apenas gana por dos puntos.
El presidente estadounidense reconoce la importancia de tener el apoyo de estados que producen maíz, pues tienen importancia en el colegio electoral. Dejar una lucha de esta envergadura podría dirigirlos irremediablemente al apoyo de republicanos.
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