- Si no mejora podría haber recortes a usuarios
- Afectaría a los estados de ambos países
- El anuncio sería en julio del 2023
Por César Villalobos López
MEXICALI. – Las condiciones del sistema de la cuenca del Río Colorado se siguen deteriorando con un almacenamiento combinado del sistema es de apenas el 28%, según información proporcionada por la Comisión Internacional de Limites y Agua el pasado 30 de noviembre.
Ese almacenamiento, en el mes de agosto era del 34% y la reducción es consecuencia de que los últimos cuatro años han sido los que más bajo registro en cuanto a ingresos de volúmenes a las presas.
De presentarse los bajos escurrimientos pronosticados para el próximo invierno 2022-2023, las reducciones, anunciadas para México en el mes de agosto, de 128 millones de metros cúbicos podrían ser insuficientes y propiciar que se lleguen a niveles de operación inaceptables.
Esto obligaría a que las entregas de agua a los usuarios de la Cuenca Baja del Río Colorado incluyendo a México, por lo que eventualmente sería necesario que ambos países adopten medidas extraordinarias para proteger el sistema tan pronto como en 2023.
La Sección mexicana de la CILA, destaco que la información es producto de la reunión con su contraparte estadounidense y autoridades de ambos países incluyendo la CONAGUA, en la cual se evaluaron las condiciones actuales de la cuenca del Río Colorado.
Desde la firma del Tratado de Aguas de 1944, es la primera vez que se enfrenta una situación de esta naturaleza en el Río Colorado, lo que nos pone frente a situaciones inéditas y a buscar soluciones innovadoras que nos permitan transitar por esta coyuntura hasta en tanto las condiciones de escurrimiento y almacenamiento mejoren.
La actual sequía es la peor de los 114 años de historia de la que se tiene registro. Continuamente se registra un nuevo nivel histórico a la baja en las presas del sistema. Ambos gobiernos estarán llevando a cabo en los próximos meses una serie de reuniones para identificar y definir las acciones que deban adoptarse con la meta de evitar el colapso del sistema y buscar asegurar los abastecimientos mínimos que podrían requerirse en ambos países.
Se espera que dichas acciones puedan anunciarse en el mes de julio de 2023. Ante la incertidumbre sobre el comportamiento de las presas, por los almacenamiento tan bajos y nunca experimentados, resulta urgente la adopción de medidas adicionales.
La Sección mexicana de la CILA continuará informando de la evolución de las condiciones de la cuenca y de la adopción de cualquier medida que se identifique como viable para la protección del sistema.
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