¿Cuál es la prisa?

Por Eliott Valdez Montaño

Hoy, con bombo y platillo, la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda anunció que el lunes 28 de febrero todos los alumnos de todos los niveles educativos regresarán a clases presenciales en Baja California.

Acompañada de los Secretarios de Educación y Salud, Gerardo Solís Benavides y Adrián Medina Amarillas, respectivamente; así como de Juan Enrique Villanueva, dirigente de la Sección 2 del SNTE y de Ampelio Íñiguez Arellano, de la Sección 37, Ávila Olmeda comentó de una manera muy optimista que las condiciones están dadas para que todos regresen a clases.

Sin duda, volver al aula era algo inminente. La pandemia sigue, y aunque los casos han bajado, la contención a través de la vacunación al personal educativo ha sido detonante para que el gobierno estatal decidiera la reanudación de cursos presenciales.

No obstante, me parece que la fecha es precipitada. Avisan un miércoles para regresar el lunes, ¿de verdad las escuelas están en condiciones para recibir a todo el alumnado?, ¿los maestros tendrán tiempo para organizarse y acondicionar sus espacios para el retorno?, ¿los padres de familia contarán con recursos para adquirir uniformes y material necesario para sus hijos?

¿De verdad los muchachos que utilizan el transporte público para dirigirse a la escuela (principalmente secundarias y prepas) no corren el riesgo de contagios?, ¿las rutas de transporte funcionan de manera adecuada, o los camiones pasarán cuando los choferes se acuerden que tenían que pasar por esas rutas?

En cuatro días no se van a poder dar las condiciones para algo tan importante y a la vez tan serio como es el regreso a clases presenciales. Pudieron haber esperado una semana, y el 7 de marzo hubiera sido una fecha idónea para retornar de manera ordenada y sobre todo coordinada. De hecho esa fecha fue la que estableció la UABC desde inicio de semestre para el regreso a cursos presenciales en sus instalaciones.

Así pues, ¿Cuál es la prisa?

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