Por Bertha Sánchez
La participación política de las mujeres en México ha avanzado a pasos firmes y agigantados, producto de nuestro gran anhelo de ser consideradas en espacios de toma de decisiones, en candidaturas, en cargos gubernamentales, dirigencias de partidos políticos, etc., ya es una realidad.
La participación femenina se ve a lo largo y ancho de nuestro país, en cada Entidad Federativa podemos observar la presencia de mujeres, claro mucho tiene que ver con los porcentajes de paridad de género que nos corresponden, que en verdad nos ha costado mucho trabajo conquistar y ENTRE TODAS lo estamos logrando.
La lucha por la equidad de género en territorio mexicano no ha sido nada fácil. Este caminar inicio tras la conquista de haber obtenido el sufragio femenino. Y para que este logro se respetará tuvieron que pasar todavía unos bastantes años. Sin duda nuestra participación en todos los ámbitos de la sociedad, ya sea en actividades económico-laborales, industriales, comerciales, educativas, gubernamentales o políticas, estas nos han abierto las puertas, SI ESAS PUERTAS QUE TANTO HEMOS TOCADO la mayoría de las mexicanas, para obtener la confianza de los ciudadanos para ocupar cargos y responsabilidades en las llamadas esferas de poder.
Eso si un poder bien entendido y bien enfocado con pleno conocimiento de que es lo que queremos hacer por nuestra sociedad, por las familias y por nosotras mismas.
Nuestra transición hasta estos espacios ha sido de una manera democrática y de forma organizada, nos hemos preparado y seguimos en ese proceso de profesionalización, nos empoderamos y seguimos trabajando con mujeres aun con formas de pensar distinto unas de otras, respetamos las ideologías, religiones, estatus socio-económicos de cada mujer.
Considero que esta parte ha sido fundamental en la búsqueda de nuestro crecimiento. Queremos hacer las cosas bien, porque no buscamos experimentar para equivocarnos necesariamente, si no para tener éxito y una verdadera realización personal y colectiva. Las MUJERES sabemos perfectamente que si le va bien a una le va bien a todas.
Por ello nuestro trabajo lo ponemos al centro de nuestra comunidad para que este se traduzca en mayor bienestar social, más seguridad, certeza jurídica y laboral y así un crecimiento integral de generación a generación, compartiendo todas las tareas y actividades con el género masculino, así con esa atinada visión de futuro actuamos las mujeres.
Si estoy hablando por mí pero también por las mujeres con las que convivo dia a dia, sé que todas buscamos ser ciudadanas de una gran calidad humana, honestas, genuinas, solidarias y ante todo justas. No perderemos el tiempo, no encontramos ante una oportunidad histórica de ver mujeres grandes, mujeres lideres, mujeres resilientes, ciudadanas dignas de ser fuente de inspiración para todas y todos. SER MUJERES EN EVOLUCION.
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