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Módulos de riego, tierra sin Ley

Hace varios años que dejamos de utilizar este epígrafe para referirnos a las situaciones de los módulos de riego, en el Distrito 014 del Rio Colorado, pero al paso del tiempo nos damos cuenta de que, en algunos casos, se han tenido avances positivos y en otros atrasos.

El mayor problema que se observa es la serie de complicidades como resultado de compromisos a futuro para continuar en los cargos directivos de las asociaciones civiles o incrustarse en los Consejos de Administración y de Vigilancia, de la S. de R.L. concesionaria de la red mayor del Distrito de Riego.

Desde nuestra perspectiva, la corrupción, por complicidad, omisión o intereses, inicia en la complacencia que los funcionarios de la Comisión Nacional del Agua que son omisos en vigilar el cumplimiento de los Títulos de Concesión a cada una de las asociaciones civiles de los módulos de riego que operan en el valle de Mexicali y San Luis, R.C. Sonora. 

Hace tiempo, usuarios del módulo 4 emprendieron una lucha en contra de los directivos y de los agricultores que, por cuestiones de influyentísimo sembraban sin permiso de riego, cambiaban de cultivo sin modificar los permisos o generaban fuertes adeudos que parecían incobrables.

En el módulo 18 se vivieron situaciones difíciles cuando usuarios con una o dos hectáreas de permiso de riego y sin un terrón que sembrar, ocuparon cargos directivos y podríamos decir que se viven, por la ambición de algunos representantes de usuarios que no viven de la agricultura, pero pretenden imponer sus criterios.

Lo grave, en este caso, es que, con los conocimientos logrados al paso por la dirección o gerencia de una de las desaparecidas unidades de riego, se busca notoriedad y desde luego incrustarse en la dirigencia.

Pero estas situaciones de agitación surgen generalmente en momentos previos a los cambios de los consejos de administración y de vigilancia, como el del módulo 18, el 8 y el 9A, por mencionar algunos.

Las autoridades de la Comisión Nacional del Agua, cuando les conviene dicen que son rectoras, sin que su rectoría, menos su autoridad, sea palpable en el ordenamiento.

Por regla general, la omisión de la Comisión Nacional del Agua ha ocasionado que en el modulo 14 se tengan tres directivas, con el natural deterioro de la operación y administración, en detrimento de los usuarios, quienes por intereses se dividen y generan el caos.

En esta asociación civil, luego de su elección como presidente, el Ingeniero Gazca enseño el cobre y pretendió sorprender al resto de los integrantes del Consejo de Administración para que le firmaran un poder con amplias facultades, como dueño único, de los bienes del módulo y con capacidad para todo tipo de transacciones económicas, sin tomar en cuenta al secretario administrativo. ni al tesorero, menos a los consejos de vigilancia. 

Presumió que tenia todo el apoyo de directivos de la S. de R.L. para llevarlo a la nueva directiva en el 2022, por haberles apoyado en el proceso electoral del 2019.

A raíz de la negativa para la firma del poder, se agravaron los problemas y surgió una nueva directiva y luego otra, a ciencia y paciencia de la autoridad rectora, sin observar las violaciones al título de concesión.

En el modulo 8, las cosas no son menos graves, los actuales directivos no han cumplido con la observación de lo establecido en el título de concesión respecto a planes de riego y otra normatividad, pero los rectores soslayan la irregularidad y con ello surge la impunidad.

Pero no solo las autoridades de la Comisión Nacional del Agua son cómplices de las irregularidades, los funcionarios de la Fiscalía General del Estado, no hacen malos quesos al confabularse con los denunciados a través de la dilación de términos o cambios de fecha para darles largas al asunto y dejar que el tiempo pase.

Lo grave de estos funcionarios de la Fiscalía es su intromisión en declaraciones de testigos, buscando eliminar aspectos que involucran o confirman las acciones denunciadas por los quejosos o afectados.  

En este caso, como en otros muchos, como el del modulo 9 B, generador de grandes expedientes de violaciones al título de concesión y comprobación de desviaciones de dinero, de uso irregular del agua por parte de directivos, la Comisión Nacional del Agua “nadó de muertito y nada pasó”.   

Recuerdo que al cuestionar un funcionario del Distrito de Riego nos mencionó, si tenemos las evidencias, pero nada puedo hacer, son instrucciones de arriba, pero siempre se resistió a mencionar desde done venia la orden de ignorarlo.  

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