En otro mundo
No cabe la menor duda de que en México estamos viviendo tiempos inéditos en la administración pública, no solo a nivel nacional, sino también en algunos estados como Baja California, donde desde hace cerca de dos años no hay proyectos de inversiones generadores de empleo, por parte del gobierno de Jaime Bonilla Valdez, pero si muchas descalificaciones, señalamientos, insultos y hasta
Desconocemos si esto ocurra en otras entidades, pero sin duda alguna, las acciones Bonilla Valdez son una burda copia de lo que diariamente ocurre en el Palacio Nacional, con las mañaneras del presidente Andrés Manuel Lopez Obrador, en donde, al igual que ocurre aquí, golpea a diestra y siniestra, encuentra culpas ajenas y soslaya los deslices de su administración.
Hace unos días, con motivo del segundo aniversario de la creación de la Guardia Nacional, el Jefe del Ejecutivo pondero que ya son 100 mil efectivos de ese cuerpo militarizado -fueron entrenados y preparados por elementos del Ejercito Nacional y la Marina, dijo- contra 49 mil que formaron parte de la Policía Federal en el pasado reciente.
Y, efectivamente, cuando menos en Mexicali, se observan a elementos de la Guardia Nacional que se pasean a lo largo y acho de la ciudad y el valle, lo mismo ocurre en Tijuana y seguramente en el resto del país, pero ello no implica que la seguridad del ciudadano se haya incrementado, porque la suma de ejecutados aumenta día con día, en mayor número a los ocurridos en el pasado.
El diario enfrentamiento del gobernador Bonilla Valdez, en ocasiones utilizando a Fisamex, a Luis Salomón Faz Apodaca o a Vicenta Espinoza Martínez, de las secretarias del Agua y de la Honestidad, respectivamente, han generado la polarización entre sociedad y gobierno, que en nada contribuye al desarrollo económico y social de la población.
Ante esta situación, Marina del Pilar Ávila Olmedo tiene frente a ella un gran reto, y, aun cuando ella ha llamado a la unidad, no a la confrontación, el restañamiento de las heridas dejadas por su antecesor, será difíciles de curar para su sanación, pero nada es imposible si hay voluntad.
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