Semanario El Pionero

Expresión de Mexicali y su Valle

El “Cacho” ingresa al Salón de La Fama de Mexicali

Por Rafael Mendoza Madrid

Antes que pretender hablar siquiera, de La Crónica Deportiva, si con alguien debe uno cuadrarse, ponerse de pie y quitarse el sombrero antes de hacerlo, es precisamente frente a Don José Luis “El Cacho” Mendoza Galván, y a quienes los que en verdad conocen de esta está nada fácil disciplina del saber escribir bien, de todo lo que involucra al deporte en sus diversas manifestaciones. Por fin, quienes conocen de deporte también, se fijaron en su reloj y detuvieron su paso para tomar la atinada decisión de aprobar su ingreso al Salón de La Fama de Mexicali.                      

Un Galardón del que solo se hacen merecedores los triunfadores, los grandes, esos que no nacen en maceta todos los días, y El Cachito, es uno de esos grandes y que ya pronto, este 21 del presente mes, le serán abiertas de par en par las puertas de dicho recinto de La Fama y las que por cierto y con justificada razón, no se le abren a cualquiera.                         

Don José Luis Mendoza Galván, llegará con la frente en alto a dicho templo a formar parte de la pléyade de otros grandes que como él se ganaron el derecho a ser admitidos en este exclusivo recinto al que solo ingresan los elegidos.

Y Don José Luis, estoy plenamente seguro, después de esta Entronización a la fama, seguirá siendo el mismo, un personaje sencillo, natural y sin poses de arrogancia y de soberbia, porque los grandes así son, entre más encumbrados, más humildes.         

De Don José Luis, hay mucha historia que contar, pero de esa historia limpia, sin mancha y de la buena, pero para ello se necesitarían escribir muchos libros y todavía quedaría algo o mucho en el tintero.                            

Llegó a estas tierras Cachanillas   el 4 de agosto de 1951, a la edad de 17 años, procedente de su natal Ciudad de León, Guanajuato cuando Mexicali, todavía era joven, como joven sigue siendo su historia.  Llegó respirando a deporte, a olor a agua del entonces turbulento Río Colorado, a aroma de ramas de Cachanillas, a cáscara del capullo de algodón, solo enturbiadas sus fragancias por ciertos aires provenientes del Río Nuevo.         

Llegó lleno de ilusiones, cargando en sus manos sus raíces de origen para venirlas a trasplantar para siempre en estas hospitalarias y generosas tierras Cachanillas, y aunque procedía de una Ciudad en la que, según otro Guanajuatense, el compositor e intérprete José Alfredo Jiménez “ La Vida no vale nada” él, al pisar tierras Cachanillas y beber por primera vez agua del Río Colorado, se olvidó de esta afirmación y  vino hacer su vida valedera desde el momento en que entró a trabajar como linotipista en el Diario ABC que nació y desapareció  en donde hoy opera La Voz de La Frontera, sin imaginar siquiera que de allí saldría jubilado después de haber realizado una brillante carrera en el ejercicio ininterrumpido de La Crónica Deportiva, habiendo sido uno de los socios fundadores en 1960 de la Asociación de Cronistas Deportivos de Mexicali cuyo primer Presidente fundador fue don Jesús Eguia  Molleda y su Secretario don Néstor Segovia, ya fallecidos 

Don José Luis fue en consecuencia el Primer Tesorero de esta agrupación aunque reconoce, sin agravio ni rencores, que casi todos los demás socios nunca pagaban sus cuotas, “ con excepción de nosotros los directivos” relata sonriendo.     

Todavía recuerda cuando siendo Presidente Municipal de Mexicali el Doctor Federico Martinez Manatou, les donó, previa aprobación del Cabildo, de un terreno ubicado en donde hoy funciona el parque “ Cri-Cri “ del DIF Local, para que allí se construyera el Salón de La Fama de Mexicali, “.. pero como no se le dio seguimiento al proyecto, el asunto quedó olvidado.  

Dicen que también es de hombres nobles llorar y como El Cachito, al igual que yo, es muy sentimental, ya lo estoy viendo llorar al momento de recibir este digno, grande y merecido testimonio inmortal.    

¡HONOR, A QUIEN

HONOR MERECE!