Semanario El Pionero

Expresión de Mexicali y su Valle

Las decisiones gubernamentales están acabando con el agro mexicano

  • Urgen apoyos para poder lograr la tan anhelada autosuficiencia alimentaria
  • Recortan presupuesto de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural
  • Desaparecen los programas de apoyo a la agricultura comercial
  • Eliminan los estímulos fiscales a la gasolina y al diésel para uso agropecuario y pesquero
  • Prohíben el uso de algunos productos para la protección de cultivos y otros que sacarían 
  • de mercado a los agricultores

CIUDAD DE MÉXICO.- El Gobierno de México publicó en el Diario Oficial de la Federación, el pasado 29 de mayo, un acuerdo con el que elimina diversos estímulos que limitan la productividad, la competitividad y la rentabilidad del Sector Agroalimentario mexicano, pone en peligro la producción de alimentos y la seguridad alimentaria.

Justo cuando en Estados Unidos, nuestro principal socio comercial, se anuncian apoyos históricos por más de 19 mil millones de dólares para sus productores agroalimentarios para mitigar los impactos de la crisis económica global que estamos viviendo, en México se toma una decisión exactamente contraria eliminando estímulos que tendrán un impacto negativo para el Sector Agroalimentario del país, lo que derivará en una mayor dependencia de las importaciones en materia alimentaria.

El recorte al Presupuesto de Egresos para la Secretaria de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) para este 2020 es desmesurado, equivalente al -27.5% respecto al del año anterior.

Además de la eliminación de varios programas y reducción de recursos a otros, se prevén recortes adicionales como la desaparición de apoyos para el seguro agropecuario, para esquemas de mitigación de riesgos, y fideicomisos como el Fondo Nacional de Garantías (Fonaga), que ha sido un promotor del financiamiento para el sector agroalimentario, precisamente beneficiando a pequeños productores.

Adicionalmente desapareció el estímulo fiscal en los sectores pesquero y agropecuario a partir de junio, para el caso del estímulo al diésel pesquero se argumenta que el mecanismo actual es ineficiente y no beneficia directamente a los pescadores, acuicultores de menores recursos y para el caso del estímulo del diésel agropecuario se elimina debido a que no se han establecido los mecanismos de implementación necesarios para su operación.

El porcentaje de estímulo se aplica a las cuotas sobre el IEPS de los combustibles que, para mayo, representaban para el diésel pesquero un 45.96% y para el diésel agropecuario un 36.76%. Como referencia, actualmente el diésel en México tiene un costo de alrededor de 19 pesos por litro, mientras que en Estados Unidos a un productor agrícola y pesquero le cuesta 6.7 pesos por litro, es decir, que el productor mexicano gasta el triple que su competidor estadounidense en este energético.

Aunado a lo anterior, existen prohibiciones y restricciones en permisos para el uso de diversos productos para la protección de cultivos, sin tomar en cuenta los impactos negativos que esto tiene para la producción de alimentos en nuestro país.

La producción de alimentos debe ser un tema de seguridad nacional para el Gobierno de México; sin embargo, este Acuerdo no busca proveer de alimentos a la población, frena la generación de empleos que tanta falta nos hace, dista de promover la generación de divisas y derrama económica para nuestro país, de combatir la pobreza y generar mayor bienestar para las familias mexicanas.

Como Sector solicitamos la intervención urgente del Presidente de la República, Lic. Andrés Manuel López Obrador, para que los productores del campo y del mar mexicanos puedan seguir produciendo alimentos para toda la población y poder lograr la tan anhelada autosuficiencia alimentaria.