De acuerdo a estadísticas nacionales, toda mujer padecerá al menos una vez en su vida una infección vaginal, por ello el Gobierno del Estado, a través del Hospital Materno Infantil de Mexicali (HMIM), informa que es importante conocer las medidas preventivas y atención adecuada para impedir que estos padecimientos se agraven y generen consecuencias lamentables.
En ese sentido, autoridades del HMIM, señalan que si se presenta ardor, comezón, mal olor, molestias al orinar o tener relaciones sexuales, así como aumento de la secreción vaginal (flujo), los síntomas más comunes; debe acudir a recibir atención médica.
Se estima que hasta un 30% de las consultas ginecológicas están relacionadas con las infecciones vaginales, que se presentan con mayor frecuencia entre los 20 y 45 años.
Así mismo, tener bajas defensas o atravesar por cambios hormonales, pueden ser algunos de los factores de riesgo; por eso las mujeres embarazadas, con diabetes, en tratamiento de quimioterapia, en etapa de adolescencia o climaterio, podrían ser más propensas a presentar una infección.
Es importante que cuando la mujer presente los síntomas arriba señalados no se automedique, pues es necesario definir el tipo de infección que presenta y la zona donde se desarrolla. En este caso, se clasifica como vulvitis, cuando la enfermedad se registra en los genitales externos; vaginitis, cuando es la vagina; y cervicovaginitis, cuando se detecta en el cuello del útero.
No tratar adecuadamente o a tiempo una infección vaginal, puede tener consecuencias muy severas para la salud de las mujeres, sobre todo si es una embarazada, pues el padecimiento puede provocar un nacimiento prematuro, desprendimiento de membrana, afectar al bebé e incluso en casos muy graves, ser causa de un desenlace fatal.
En el resto de los casos, el padecimiento puede convertirse en crónico al presentarse hasta 3 veces al año. A su vez, pueden ser causa de infecciones en el aparato urinario, causar dolor pélvico, durante la menstruación e incluso infertilidad.
Conocer información sobre la salud del aparato reproductivo femenino, así como identificar las secreciones vaginales normales son tareas indispensables en la población femenina, a fin de identificar oportunamente alguna alteración. Se recomienda en todo momento acudir al médico ante cualquier sospecha o molestia y no auto medicarse.
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