Entre Los Surcos…

Tapaboca a Rigo Montoya

“Tanto va el cántaro al agua, hasta a que se quiebra”, reza el viejo refrán y eso es lo que le ocurrió a Rigoberto Montoya Barraza, cuando en el módulo 4 trató de imponer su muy personal criterio sobre el de los usuarios, pretendiendo tener el mismo resultado que en el módulo 9B, después de gritar y despotricar.
Ello, el pasado viernes 28, durante la asamblea del módulo 4.
Previamente, Montoya Barraza sufrió otro descalabro junto con Efraín Hurtado Luna, quienes pretendieron modificar la convocatoria para abrir un espacio a Rigoberto Campos González quien pretendía disertar sobre su posicionamiento en contra de Constellation Brands, sus resultados como “policía hidráulico” en la revisión de canales y documentos a “piperos”, o en sus exigencia a elementos de los diversos cuerpos de seguridad municipales, estatales y federales.
Enarbolando la bandera de la defensa del agua y utilizando un exacerbado lenguaje sobre patriotismo, al igual que -con éxito- lo hizo en el módulo 9B, en el módulo 4, Rigoberto Montoya Barraza, encontró la horma de su zapato cuando endilgó, a José Luis Solorio Ramírez, diversos calificativos de apátrida, vende patrias y otros.
La respuesta no se hizo esperar… reinó un gran silencio en el salón, sin intervención alguna a favor de Montoya Barraza, quien desde que dejó la presidencia de la S. de R.L. ha buscado incrustarse en el Distrito de Riego o en alguno de los módulos donde siembra, sin logarlo.
Sin embargo, en el módulo 9B, Rigoberto Montoya Barraza, después de haber impuesto su criterio, oponiéndose todo lo relacionado sobre el acta 319, no ha sido un dechado de virtudes, menos de honestidad.
Aun cuando algunos integrantes del consejo directivo del 9B pretendan ocultar lo que, no es otra cosa que robo de agua por parte de Montoya Barraza al accionar equipos de bombeo de pozos para regar de noche, sin conocimiento del canalero, y se molesten por su difusión pública, esto puede tener dos significados: o esos directivos están coludidos en el ilícito, o les llama un interés de protección para que Rigoberto no cante y les afecte.
Basta recordar que este módulo, el 9B ha tenido el infortunio de tener varios consejos de administración y de vigilancia con usuarios pillos a la cabeza, al igual que algunos gerentes que aprovechan la buena fe de buenos directivos.
Claro que en todo ello ha prevalecido la corrupta complicidad de los funcionarios de la Comisión Nacional del Agua, a través del organismo de cuenca península de Baja California.