BC abandonada, pero “con el corazón por delante”
Que triste resulta recorrer estados del país donde se observa, a simple vista, el progreso y al dialogar con los residentes se palpa su tranquilidad, por la seguridad que les garantiza una convivencia tranquila.
En el mes de agosto, antes de que se recrudecieran los enfrentamientos que han provocado un verdadero caos en el estado de Sinaloa, por la inseguridad que sufre toda la población, a ciencia y paciencia del gobernador Rocha Moya y de sus protectores políticos… ¿Y económicos?, estuvimos en ese estado.
Independientemente de la inseguridad que ahora se padece, en ese momento estuvimos en Los Mochis, en donde nos llamó poderosamente la atención, la condición de las vialidades por su pavimento y la limpieza, contrastando con las vialidades de Mexicali, la capital de Baja California.
Con toda tranquilidad recorrimos, de Mazatlán hasta el estado de Durango, la carretera que reduce el tiempo de recorrido y deja al descubierto la capacidad de la ingeniera mexicana, cuando recorres y puedes observar el puente Baluarte, tras pasar por más de 60 túneles de distintas longitudes y perfectamente iluminados.
En ese entonces, el gobernador Rocha Moya, como la “caca del gavilán, ni huele, ni hiede” y ahora apesta para una buena parte de los sinaloenses, al igual que ocurre en Baja California con Marina del Pilar Ávila Olmedo, la dama del “corazón por delante”.
La inseguridad que se vive en Baja California, en especial en la capital del estado y su valle, aterra a buena parte de la población que a toda hora corre el peligro de estar entre dos fuegos, o ser detenido por elementos armados, aun a poca distancia de elementos de las policías municipales, del estado, de la guardia nacional o el ejército, pero no pasa nada.
La alcaldesa Norma Alicia Bustamante Martinez, igual que la dama del “corazón por delante” tiene gran interés es figurar y salir en la foto, soslayando las grandes necesidades de mejoramiento de las vialidades y aquí podríamos denominar a Mexicali como “la ciudad de los baches”, recordando al “Fauno”, Licenciado Rafael Martinez Retes.
No se puede soslayar que, en el canje o revalidación de placas, todos y cada uno de los ciudadanos aportamos 895.70, como contribución municipal, misma que en años anteriores se identificaba como mejoramiento de vialidades, pero nunca, ni los regidores, ni los diputados, tuvieron la intensión de verificar su correcta aplicación.
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