Semanario El Pionero

Expresión de Mexicali y su Valle

La lección

Por Blanca Nieves  Palacios Barreda

Reza el adagio popular: “dime que presumes y te diré de lo que careces”; esto es válido para todos, también para el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), quien afirma que: “el pueblo es sabio, noble, inteligente y muy politizado”; de tanto decirlo casi llegamos a creérselo.

En realidad, los mexicanos solemos ser olvidadizos, de ahí que, padecimos por muchas decenas de años de gobernantes corruptos, arbitrarios, mentirosos y represivos, con una gran capacidad para la obnubilación al tener el poder, que aplicaban en toda su magnitud contra un pueblo indefenso y con un gran servilismo ante millonarios empresarios y con el gobierno vecino del norte.

Fueron muchos los mexicanos que lucharon contra esos gobiernos del Partido Revolucionario Institucional (PRI)  y el Partido de Acción Nacional (PAN), en alianza con otros Partidos rémoras como: el Verde Ecologista; del Trabajo; Revolución Mexicana; Convergencia hoy Movimiento Ciudadano; Humanista; Alianza Social; Nueva Alianza; Encuentro Social; Social Demócrata; Reconstrucción Nacional; Popular Socialista; y una larga lista de estas organizaciones políticas, familiares, organizados por el mismo PRI y PAN, a fin de obtener millones de pesos para su “sostenimiento y adecuado funcionamiento” a través del organismo llamado, Instituto Federal Electoral (IFE) hoy, Instituto Nacional Electoral (INE).

El pueblo “sabio, noble, bueno, inteligente y politizado” ha tolerado y sigue tolerando a toda esa caterva de Partidos políticos, algunos perdieron su registro, pero ¡oh sorpresa!, surgen con otro nombre y el INE lo acepta; se siguen realizando esas pútridas, oportunistas y corruptas alianzas en aras de seguir sobreviviendo y el INE lo sigue aceptando y el pueblo manteniéndolos

En este sexenio del cual millones de mexicanos somos los responsables, al trabajar arduamente miles de ciudadanos para formar una Organización a la que AMLO, llamó: Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA); las expectativas nunca habían sido tan altas ni la esperanza tan firme, en la creencia de que, ahora sí: “por el bien de todos primero los pobres”.

No más concesiones a los millonarios empresarios que, con los recursos naturales propiedad de todos los mexicanos y el sudor y sangre impresos en sus trabajos engrandecían no al país, ni el bienestar de los millones de pobres, sino sus fortunas; ningún orgullo nos representa tener a un Carlos Slim, señalado como uno de los hombres más ricos del mundo.

La amistad que, quizá necesariamente se tendría que dar con esos “empresarios”, por no decir explotadores y vende patrias, por parte del presidente se dio, a pesar de haber sido atacado, denostado, insultado, y llamado, “un peligro para México”.

El mismo AMLO lo ha dicho: “a los empresarios les ha ido muy bien” y a él también agregaría; ha trabajado mucho sí, muchas conferencias mañaneras, muchas visitas a todos los estados los fines de semana sí, para hablar él, no para escuchar a ese pueblo, sabio, noble y etcétera; con todo y los programas sociales de “ayuda”, con nuestros propios impuestos, la pobreza, la miseria, siguen ahí.

A lo largo de estos 5 años y algunos meses, no podemos decir que AMLO cumplió sus promesas principales: enviar a los militares a sus cuarteles; barrer las escaleras de corrupción de arriba abajo; el pueblo mandaría porque prevalecería la democracia; no puede haber gobierno rico con pueblo pobre; no tengo derecho a fallar; la venganza no es mi fuete.

Pero se olvidó de la aplicación de la justicia en aras de no ser “vengativo”; la aplicación de justicia hubiera sido demostrada desde la formación de su gabinete; no vimos a esos militantes morenistas que mucho trabajaron en todos los estados y municipios, para llevarlo a la presidencia de México; vimos sí a muchos políticos, que por oportunistas siempre han ocupado prominentes puestos en los gobiernos.

Escribió varios libros AMLO en los que, nos daba a conocer el enorme robo hecho a través del Fondo Bancario de Protección al Ahorro (FOBAPROA), mismo que seguimos pagando cuando los beneficiados con miles de millones de pesos fueron estos mismos empresarios, a los que en varias ocasiones ha recibido en  Palacio Nacional porque, del tamaño de su ego debía ser el lugar donde decidió vivir, y ese tema del FOBAPROA, en sus mañanera ni lo mencionó, nos lo deja como un pago sempiterno que, ni nuestros nietos y bisnietos terminaran de pagar.

Las concesiones en las carreteras siguen en manos de estos empresarios ya mencionados, cobrándonos por transitar a como se les antoja, violando flagrantemente nuestra Constitución; su inocultable protección a sus funcionarios amigos como el caso de, Olga Cordero; Ignacio Ovalle; Omar Harfuch; Alfonso Romo; Alfonso Durazo; Julio Scherer Ibarra; Tatiana Clouthier; Alejandro Gertz Manero, entre otros muchos que nada tuvieron que ver con la formación de Morena contrastaron y mucho, con sus discursos cotidianos. 

Nos dice AMLO que, se retirara al término de su período sexenal, y se irá a su finca y/o rancho,” La Chingada”, una herencia, de más de 13 mil  341 mts2; porque es costumbre que, los políticos tengan una suerte para eso de las herencias, donaciones, primeros premios de la Lotería Nacional, que provocan envidia de la buena, y dice en su mañanera informativa que: “solo vendrá a la  ciudad de México a visitar a su pareja, – la no primera dama que vivió en  Palacio Nacional y sin pagar renta- y a ver cómo le hace para venir, que será en camión”, o quizá de raite, diría yo; tanta humildad es de conmovernos.

Cabe recordar que, cuando el ex presidente Enrique Peña Nieto, quien sigue siendo corrupto hasta el tuétano, le dio su tour por  Palacio Nacional, muchos ciudadanos le dimos la lectura debida: éste será intocable; y no nos equivocamos.

Nueva lección de un presidente de la República: seguimos siendo deidificadores; manipulables y fáciles de dividir, además de memoria corta.