Semanario El Pionero

Expresión de Mexicali y su Valle

Lo extraordinario de lo cotidiano…

Renovar nuestras historias 

Por Gladys Villalobos*

¿Tienes metas, objetivos o sueños de vida? ¿Cómo sostienes la motivación cotidiana? Hace días escuchaba de una pareja de españoles en su canal de YouTube, “Vida Potencial”, mismo que recomienda ampliamente por la calidad de su contenido, que el contar con una meta, objetivo, razón de vivir, es un factor determinante para nuestra longevidad. Mantener en nosotros la motivación de un plan a ejecutar, de una experiencia a vivir, de un sueño a concretar. No dejar que la vida nos pase. Por lo contrario, nosotros transitarla.

Trajo a mi mente esta filosofía de vivir que anteriormente te he compartido: Vivir la vida por temporadas ¿la recuerdas? Pasa el tiempo, le sigo dado forma y observando como pareciera que uno de los orígenes de nuestro sufrimiento como humanidad o ambivalencia, es la añoranza de lo que ya no es, de las personas que ya no están, física o emocionalmente.

El habitar la cotidianidad con un enfoque de temporadas nos permitirá recibir, dar, comprender y vivir con más gratitud y desapego; aceptar el cambio, respetar la impermanencia. Establecer metas cortas o delimitar los objetivos, me resulta muy amable para nosotros mismos. Observamos avances frecuentemente y la motivación se mantiene. 

Al apreciar nuestra vida de esta forma, como las populares series de televisión: Breaking Bad, La Casa de Papel, Friends o esa que venga a tu mente, le encuentro ventajas saludables: acotamos un tiempo de acción, no generalizamos nuestra vida. Entendemos que hay personas que llegan a nuestra vida y otras se van o cambian de rol en nuestra cotidianidad. Renovamos nuestras emociones o la “trama principal” del momento que estamos viviendo. Entendemos la evolución de la vida, de nosotros y de las personas que nos rodean. Sumamos nuevos escenarios. Nos actualizamos, junto con nuestros deseos y necesidades. 

No importa la edad que se tenga, alimentamos nuestra razón de estar vivos, nuestro entusiasmo, el autocuidado, la motivación para concretar esa meta próxima o deseo anhelado.

Lo más importante, aprender a detectar y sentir cuando estamos llegando al final de una temporada porque de igual forma sentiremos la energía de un nuevo comienzo. Desde hace años procuro vivir con este enfoque. Me ha funcionado de forma positiva, constructiva y entusiasta. Te invito a hacer el ejercicio de dividir tu vida por temporadas ¿Te resulta útil o no? ¿Qué encuentras? ¿Te gusta o no?

“Lo Extraordinario de lo Cotidiano”, un espacio donde cada día es un motivo. A ti que me lees, valoro tu tiempo. 

*Cachanilla de nacimiento, comunicóloga de profesión, amante del cuerpo por vocación. Crecí análoga, me convertí digital. Asesora en Comunicación, Redactora de Contenidos, Fotógrafa.  Mi sitio: gladysvillalobos.wordpress.com/