- Centralismo de Conagua afecta
- No hay respuesta a trámites
- No genera seguridad en el agua
- Algodón mejor negocio que el trigo
- A reducir voracidad de despepitadores
- Regresar beneficios al algodonero
- Falta organización de los productores
Por César Villalobos López
MEXICALI. – El campo californiano requiere atención inmediata de las autoridades federales y estatales en materia de respuestas a la gestoría y tramitología centralista que obstaculiza regularizaciones e impide que los productores tengan seguridad jurídica en materia de agua.
José Barba Orozco, afirmó lo anterior al hablar a Semanario El Pionero, asegurando que, para el gobierno federal, desde hace muchos años, el campo esta bien, pero solo para los empresarios no para los agricultores que sufren las consecuencias del desmantelamiento de la industria petroquímica, al comprar fertilizantes a un alto costo, al igual que el diésel, insumo indispensable para la agricultura.
En cuanto a la seguridad jurídica del agua, Barba Orozco refirió la buena disposición del presidente Enrique Peña Nieto que emitió tres decretos para la regularización, renovación u obtención de nuevas concesiones de pozos particulares, al tiempo que lamentó la férrea burocracias y centralismo de la Comisión Nacional del Agua y su organismo de cuenca, convertido en una oficina receptora de documentos, sin capacidad de resolución.
Es una oficina de trámite, afirmó al destacar que desde hace más de un año seis meses, uno de sus hijos presento la documentación para renovar el título de concesión de un pozo y a la fecha no ha tenido ningún tipo de respuesta.
También refirió el abandono, de parte de los encargados de Sanidad Vegetal y del Comité Estatal de Sanidad Vegetal, de la atención a los problemas fitosanitarios del valle de Mexicali, careciendo de cuadros básicos de agroquímicos para el combate de las principales plagas, así como la ausencia de energía para obligar a los productores al cumplimiento de las normas establecidas.
Habló del algodón como un cultivo redituable para el productor y apelo a los empresarios despepitadores para disminuir su voracidad y dar a los agricultores los beneficios que al paso del tiempo se les han venido escamoteando, como el rendimiento de la semilla, la borra el algodón luz, entre otros.
Sin embargo, Barba Orozco consideró que, aun así, el algodón sigue siendo negocio más rentable que el trigo, siendo por ello los incrementos en la superficie, pero insistió en que debe de tenerse una estrecha coordinación con los módulos de riego para mantener, en el cultivo de la fibra blanca, las condiciones de humedad que requiere cada variedad de semilla.
El exdirigente de la Pequeña Propiedad en San Luis, R.C., Sonora, reconoció que los productores agrícolas, en su mayoría, están en estado de indefensión por la falta de liderazgos productivos y de organizaciones económicas donde puedan negociar precios de insumos, clasificaciones y procesos de comercialización que les permitan tener, tanto en trigueros como algodoneros y productores de maíz, las mejores condiciones de precios.
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