Apuñalan en Puebla al periodista Freddy Morales

El gremio periodístico organizado de México, se une a las denuncias públicas de la agresión a apuñaladas de que fue víctima el colega poblano Freddy Morales, hechos ocurridos en su propio domicilio, hasta donde penetraron los sicarios, la tarde de este lunes.
Según la versión de su hijo y de las propias autoridades, dos hombres ingresaron a su domicilio y lo acuchillaron; presenta 15 heridas de arma punzocortante, además intentaron degollarlo sin embargo los gritos alertaron a los vecinos, lo que causó que los atacantes huyeran del lugar.
Las primeras investigaciones revelan que el reportero radiofónico, Freddy Morales Salas desde hace meses, cubría los temas de los saqueadores de combustibles a los ductos Pemex en la sierra norte de Puebla para una cadena radiofónica de Veracruz, aunque es de aclararse que recién dejó de dar cobertura a los hechos por cuestiones de seguridad personal, ya que al parecer fue amenazado.
Eleazar, hijo del comunicador, dio a conocer que luego de ser hospitalizado, su padre se encuentra fuera de peligro. “Por el corte en la garganta perdió sangre, por fortuna las heridas no son profundas y ya se encuentra fuera de peligro”.
El gremio periodístico organizado: Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX; Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP; Club Primera Plana, y Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo, CONALIPE, se une a El Colectivo de Alerta Temprana de Periodistas y Defensores de Derechos Humanos en el Estado de Puebla y a La Casa de los Derechos de Periodistas, a su denuncia y protestar “por los hechos recientes, en donde células del crimen organizado han lanzado amenazas de muerte contra compañeros periodistas de la región del llamado Triángulo Rojo”.
Asimismo, exige a las autoridades estatales y federales las más amplia e inmediata investigación para llevar ante los tribunales a los autores intelectuales y materiales de esta agresión y ponga remedio a esta intolerable situación de amedrentamiento que sufren los periodistas no sólo en Puebla, sino en todo el país.