Invita IMSS a consumir frutas y verdudas de temporada

El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) invita a que los padres de familia inculquen en sus hijos la ingesta diaria de frutas y el consumo libre de verduras en la dieta diaria, además de fomentar una alimentación sana para toda la familia con la finalidad de incrementar la resistencia a enfermedades infecciosas, prevenir padecimientos como la obesidad, diabetes mellitus, hipertensión arterial, padecimientos cardiovasculares e incluso,  cáncer.

Ana Elizabeth Falcón Rodríguez, nutrióloga del IMSS en Tijuana explicó que esta sencilla fórmula disminuye la prevalencia de enfermedades relacionadas con la mala alimentación como el sobrepeso y la obesidad; enfermedades presentes en gran parte de la población y que eventualmente desarrollará otras crónico-degenerativos como la diabetes.

Agregó que la hipertensión arterial  está   vinculada con la mala nutrición y en la actualidad afecta a la población mayor de 45 años de edad. Las enfermedades del corazón son la segunda causa de muerte entre los mexicanos.

La nutrióloga indicó que para llevar un plan alimenticio que incluya frutas y verduras se deben seguir algunas recomendaciones: incluirlas en las sopas, aderezarlas como guarnición e integrarlas en los guisados.

Para las porciones de frutas se sugiere agregarles cereal o yogurt, beberlas en agua endulzadas con poca azúcar, prepararlas en ensaladas para el desayuno o como postre; incluirlas como adorno en platillos o ensaladas  y comer al menos una entre comidas para calmar el hambre en forma rápida y saludable.

Ambos alimentos son fuente importante de vitaminas, antioxidantes, fotoquímicos, fibra y agua. Además, proporcionan alrededor de  18 por ciento del consumo diario de líquidos en un adulto, que es necesario para el proceso digestivo, eliminar productos de desecho, lubricar articulaciones y regular la temperatura del cuerpo.

Los antioxidantes se encuentran principalmente en brócoli, col, coliflor, alcachofa y tienen sustancias anticancerígenas. Las verduras y frutas son fáciles de preparar y aportan pocas kilocalorías, grasas y sodio. Una ración consiste en una pieza mediana, por ejemplo de fruta (manzana, pera, mandarina) o el contenido de una taza