
Juan Meléndrez Espinoza, secretario de Agricultura y Desarrollo Rural de Baja California.

Por Dianeth Pérez Arreola
Hace tiempo publicamos que el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural de Baja California, la SADER, Juan Meléndrez Espinoza, pretende nombrar a una abogada recién graduada en un cargo para el cual no tiene ni la experiencia ni los estudios requeridos. En cambio, tiene otros atributos que Meléndrez ha tomado muy en cuenta, hasta para asignarle un vehículo oficial.
Pero no es la única beneficiada con un puesto de trabajo. Hay una lista de amigos y parientes tanto del secretario como de su esposa, Leticia Guerrero, que han sido contratados con sueldos y condiciones laborales privilegiadas.
Nos cuentan que entre las contrataciones más destacadas sobresale la de Daniela del Llano Guerrero en Relaciones Publicas, sobrina de la esposa de Meléndrez. Proveniente de la Secretaría General de Gobierno, habría sido transferida a la SADER mediante cambios de adscripción que involucra la plaza de confianza de otra dependencia. El cambio se dio a la salida de Catalino Zavala, sin que Alfredo Álvarez siquiera se enterara y mucho menos lo autorizara. Del Llano Guerrero no se presentó a trabajar durante la campaña de 2024.
Dicen que también le dieron cabida en la burocracia a Wendy Valenzuela, prima del secretario, y a un sobrino de la esposa de Melendrez que, según fuentes internas, ni siquiera se presenta a trabajar.
La lista de allegados crece con la artista Claudia Manjarrez, amiga personal de Leticia Guerrero, y Gabriel Pérez, hijo de un funcionario del mismo nombre, quien es uno de los mejores amigos de Melendrez.
Casos especiales son los de Gerardo Barroso, supuesto amigo cercano del secretario con funciones poco claras y escasa formación académica, y Martín Cota, actual secretario particular de Juan Meléndrez e hijo del contador Martín Cota Ochoa, director de administración de SADER.
En un recuento más amplio, se menciona que Ernesto Meléndrez, hermano del secretario, labora en la Comisión Estatal de Servicios Públicos (CESPM), mientras que sus hijas están empleadas en la Secretaría de Educación y en la Dirección de Infraestructura de la Secretaría de Bienestar, respectivamente.
LOS MELÉNDREZ DE LA CESPM.
Ante este panorama, surgen preocupaciones sobre la imparcialidad, la transparencia y la eficiencia de una dependencia. El nepotismo genera serias dudas sobre la correcta aplicación de los principios de mérito y servicio al bien común que deberían regir la administración pública.
LOS MELÉNDREZ DE LA SECRETARÍA DEL BIENESTAR.
En otro tema, los bomberos de Mexicali me cuentan que están por dar contratos nuevos a hijos e hijas de bomberos, haciendo a un lado a los voluntarios que llevan años acumulando experiencia y esperando una oportunidad.
También me dicen que el subdirector Lozoya quiere meter a su pareja sentimental como paramédica sin tener la preparación requerida. Ahí le encargamos, síndico.
Más historias
Presidenta Claudia Sheinbaum, clave para reactivar el campo de Baja California y México
Gastón Luken; el gobierno presente y la ciudanía ausente…
Promueven vacantes laborales en Mexicali