Semanario El Pionero

Expresión de Mexicali y su Valle

Berdegué se rinde ante los Cárteles Agro-financieros

Julio Berdegué.

Por Alberto Vizcarra Ozuna/ Voces del Campo

CD. OBREGÓN, SONORA 10 de julio del 2024.- Hay días desafortunados y el viernes 28 de junio terminó siendo uno de ellos, cuando el próximo secretario de Agricultura, Julio Berdegué, hizo explícito que el gobierno de Claudia Sheinbaum dejará de lado la aspiración de reducir la importación de maíz amarillo, al mismo tiempo que formaliza la renuncia a lograr la autosuficiencia en la producción de ese tipo de grano.

Para los productores y ciudadanos del Frente Nacional por el Rescate del Campo Mexicano (FNRCM), tales dichos tienen un toque entreguista a los corporativos agro-financieros que durante los últimos años se han venido apoderando del mercado nacional agroalimentario, propiciando la descapitalización de los productores nacionales, una profundización en la dependencia alimentaria y creciente inflación en la canasta básica.

Las desconcertantes declaraciones de Berdegué, reclaman que la presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, ponga distancia de las mismas. Es inadmisible que el estado mexicano renuncie al fortalecimiento del mercado nacional alimentario, a sabiendas de que tal acción coloca al país y su soberanía en una vulnerabilidad extrema frente a los intereses financieros y corporativos privados, siempre dispuestos a sacar ventaja de estas debilidades estratégicas para imponer condiciones que caminan a favor de sus agendas geopolíticas y en contra del interés nacional.

Toda maldad tiene que ser soportada en una mentira, y Julio Berdegué miente para tratar de justificar que continuarán entregando el mercado nacional de alimentos a los grandes importadores que durante el presente sexenio se constituyeron en los principales succionadores de la renta nacional.

Berdegué dice que el gobierno de López Obrador, ejecutó una política orientada a reducir las cuantiosas importaciones de maíz amarillo, tratando de sustituirlas con producción local, pero con escasos resultados. Para luego afirmar que el gobierno encabezado por Sheinbaum, buscará mantener la autosuficiencia solo en maíz blanco.

Son muchos los años que Berdegué ha permanecido en la burocracia y mucha la currícula académica presumida. A la sombra de ello podría pensar que goza de la autorización para mentir, pues es evidente que el gobierno de AMLO nunca procuró disminuir las importaciones de maíz amarillo y menos proteger e impulsar la producción nacional de granos, como lo sostiene el próximo Secretario de Agricultura. Los datos son duros, y no existen otros: durante el sexenio que está por concluir, ni se trató de reducir la importación de maíz amarillo, ni se procuró apoyar la producción nacional de maíz blanco.

El sexenio de López Obrador, está cerrando con un incremento de más de 30 por ciento en las importaciones de maíz amarillo, sin dejar de considerar otros productos agro-alimentarios que fueron liberados de todo arancel a la sombra de un acuerdo contra la inflación que estaba previsto resultaría un fraude. Al mismo tiempo que se registra una caída en la producción nacional de maíz blanco.

Estados emblemáticos en la producción de este cereal, como Sinaloa, dejaron de producir más de dos millones de toneladas, afectados por la sequía y la desprotección del gobierno federal que los abandonó a la suerte de la errática y especulativa política de precios gobernada por la bolsa de Chicago.

Las mentiras de Berdegué son grandes, pero no pueden ocultar la realidad. La verdad es que la política alimentaria del actual gobierno se dictó por los corporativos agro-financieros que dominan el mercado de las importaciones de alimentos.

Aliado con esos poderes el gobierno se sintió con la fuerza para denostar a los productores nacionales e incluso encarcelarlos en respuesta represiva a las manifestaciones y exigencia de una política de precios de garantía consecuente con el mercado nacional. Si el gobierno de Sheinbaum se mantiene en esa continuidad, el país profundizará su dependencia alimentaria y su vulnerabilidad frente a los poderes geopolíticos que dominan el espectro conformado por el bloque económico del TLCAN-TMEC.