Editorial…

Acarreados sin acarreo

Tras su fracaso, por el no efecto de sus insultos y señalamientos en contra de los organizadores y/o participantes en la marcha del pasado domingo 13, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció una marcha de apoyo a su gobierno, para el domingo 27.   

El creador del Movimiento de Regeneración Nacional, conocido como Morena, desde su pulpito mañanero de Palacio Nacional, primero descalifico y minimizo la presencia de ciudadanos que marcharon para mostrar su respaldo al INE, árbitro electoral que coordinó el proceso electoral del 2018, en el que fue electo presidente de México.   

Enseguida presumió tener un gran respaldo de la ciudadanía con el “70 por ciento de aprobación”, dijo, para luego asegurar que lo demostrará con la aportación, de quienes apoyan la cuarta transformación, en la marcha de mañana domingo 27.

Aseguro que, en forma espontánea, sin acarreos, llegarán, al Zócalo de la capital del país, miles de residentes de todos los estados de la república, encabezados por los gobernadores, alcaldes, munícipes, diputados federales y estatales, así como senadores de la 4T.

Así, los gobernadores ungidos como candidatos de Morena, aun cuando su origen es de otros partidos, se están empeñando en proporcionar transporte, hospedaje y alimentación, además de diversas cantidades, de entre 300 y hasta 750 pesos por día, adicionales para gastos.

Pero eso no se puede identificar como acarreo, porque aseguran que los ciudadanos se inscriben en forma espontánea y sin ninguna presión buscan ser incluidos entre los viajantes a la ciudad de México, para participar en la marcha de apoyo al presidente López Obrador. 

De lo que si estamos seguros es de que, en la mañanera del lunes 28, el presidente magnificará el número de asistentes e insistirá en que no hubo acarreados y se superó en mucho al contingente que hizo lo mismo, dos semana antes.