Semanario El Pionero

Expresión de Mexicali y su Valle

Entre Los Surcos…

El negocio de las conferencias

En el campo mexicano existe una elite de funcionarios y técnicos que han encontrado, en las platicas o conferencias, especialmente relacionadas con el campo. una importante fuente de ingreso.  

Hace tiempo vino al Valle de Mexicali un hombre, sonrisa flor de labio, daba la impresión de ser descuidado en su vestir, algo carismático, pero hosco, hasta cierto gado, dependiendo de la figura que estuviera representando en el momento.

Nos referimos al controvertido Ingeniero Ignacio Lazcano Martínez, quien fuera director general del Banco de Crédito Rural del Noroeste, con sede en Ciudad Obregón, Sonora, desde donde se operaban las sucursales A de la institución en Mexicali y Ensenada Baja California.

Yo de siempre externe mis dudas sobre algunas cualidades que sus colaboradores destacaban cuando fue funcionario del Banco de Crédito Rural del Noroeste, tal vez porque ellos, por su cercanía, observaban de cerca lo que yo no podía ver o apreciar.

Sin embargo, el tiempo me dio la razón, aun cuando son muy pocos los productores agrícolas que, en su momento coincidieron conmigo, en cuanto a los negocios de Lazcano Martínez, junto con su hijo.    

Para ese negociazo, desconocemos si Doña Carmen Quintana, en su momento presidente de la Fundación Produce, tuvo alguna recomendación o presión de la secretaria de Agricultura o de su delegación, para otorgarle un contrato por 5 millones de pesos para un supuesto estudio sobre la fertilidad de cada uno de los suelos, tanto ejidales como de colonia.

Se suponía que cada productor, vía satélite podría identificar deficiencias o potencial de nutrientes y materia orgánica, pero, si bien, en lo personal logre la ubicación satelital de mi predio, nunca logre bajar los datos que ofrecieron.

Creo que, a Mario Adolfo Cota Hernández, le sucedió lo mismo.

Lo bueno que en ese contrato genero ingresos, para unos cuantos agrónomos que participaron con él, en el supuesto estudio.

Mas tarde lo volvimos a ver durante una conferencia en las instalaciones del Modulo 7, con Everardo Ramos García como presidente.

Nos llamó la atención que una de las cosas más importantes de Lazcano Martínez era la firma de los asistentes, en dos listas o relaciones distintas.

Después nos enteramos por qué a los especialistas del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y Pecuarias, de todos los niveles, así como a especialistas en diversos temas relacionados con el campo, les interesa la firma de asistencia a demostraciones de camp, platicas diversas, etc.

No hace mucho, cuando productores agrícolas del valle de Mexicali se ilusionaron con la siembra de cacahuate, de ajonjolí, recordamos, en el caso del ajonjolí, que cuando la planta estaba pasando de flor a vaina, un prestigiado técnico investigar del INIFAP pregunto quien era el que había dado seguimiento y tenía la bitácora de cada predio.     

Alguien le comento que era el Ing. Ernesto Pasos y de inmediato se dirigió a él, mencionándole que le pasar los datos para de la bitácora para darle seguimiento y hacer un reporte final sobre el comportamiento y resultados del cultivo.

Ah, pero igual que en las reuniones cerradas, la lista de asistencia también era requerida y cada asistente, incluyendo productores del predio, la tenían que firmar.  

A mí, desde al inicio de mi actividad periodística en el sector primario, me llamo la atención las listas y en ocasiones duplicada o triplicadas, dependiendo de los expositores, el tema o el lugar.

Pues resulta que instituciones gubernamentales y creo que, hasta el Banco de México, remuneran con más de cien mil pesos a los expositores, dependiendo también del número de asistentes.

Fue entonces que comprendimos como, en combinación con funcionarios que se paran el cuello anunciando capacitaciones, como ocurre en la Secretaría del Campo y Seguridad Alimentaria, mientras que los expositores receben su ingreso de entidades del gobierno federal.