Entre Los Surcos…

En la CNC dirigencias a modo

Por César Villalobos López

Desde hace varios años, la otrora Gloriosa Confederación Nacional Campesina, creada en el gobierno del general Lázaro Cárdenas del Rio, entró en una etapa de decadencia como consecuencia de las ambiciones de poder político y económico de quienes llegaron a su dirigencia, pero sin ningún liderazgo.

Los más recientes Manuel Humberto Cota Jiménez, ungido como candidato al gobierno del estado de Nayarit, perdiendo el proceso electoral tras una accidentada campaña en donde salieron a relucir una serie de manipulaciones de apoyos para ganadería, involucrando también a su hijo.

Ahora, la confederación está en manos del senador Ismael Alfredo Hernández Deras, para el periodo 2018-2022, demostrando, hasta el momento, no tener ningún interés por la organización de los campesinos.

Si bien es cierto que, en el pasado, quienes estuvieron al frente de la Confederación Nacional Campesina llegaron por un interés político, se esforzaron en busca de solucionar problemas de los ejidatarios y en ocasiones lograron cierto grado de liderazgo, en la actualidad no ocurre lo mismo.

A Ismael Alfredo no le importa el fortalecimiento de las Ligas de Comunidades Agrarias y ha preferido colocar incondicionales, de obediencia ciega, como delegados con facultades de presidente, como es el caso de Humberto Calixto Mendoza en Baja California.

Este individuo ha fomentado la ya de por si fuerte división en las filas de los pocos cenecistas que todavía creen en la CNC, sea por interés político, principalmente y es entre ellos hay quienes han probado las mieles en las nóminas oficiales, como regidores, deputados locales o federales y/o como funcionarios públicos.    

Pero que se puede esperar del senador Hernández Deras, originario de Durango, estado donde no ha logrado armonizar los intereses de los campesinos para un proceso electoral que permita la formalización de la dirigencia de la Liga de Comunidades Agrarias de ese estado, junto con sus comités municipales.

En Durango, el Ing. Humberto López Barraza, hace lo mismo que Calixto Mendoza en Baja California, cuando observa que el agua turbia se está aclarando, la revuelve, con el propósito de no encontrar las condiciones para la celebración de un proceso electoral.   

Aquí, en Baja California la situación es muy clara y es que Humberto está dentro del juego político interno del Partido Revolucionario Institucional, desconociéndose si está participando en el equipo de Nancy Guadalupe Sánchez Arredondo o de Enrique Acosta Fregoso, aspirante a la candidatura por el gobierno del estado.   

Lo que si tenemos muy claro es que el delegado del CEN de la CNC en funciones de presidente de la Liga de Comunidades Agrarias, no está jugado a favor del arquitecto Víctor Galicia, cenecista que ilusamente pretende ser el abanderado del Partido Revolucionario Institucional para el gobierno de Baja California.

Esto nos lleva a considerar aquello de que, “a río revuelto, ganancia de pescadores”, siendo Calixto Mendoza el único pescador y es que el delegado ha encontrado la forma de subsistir cómodamente, sin importarle la suerte de los campesinos.

Curiosamente, a una buena parte de los campesinos bajacalifornianos, desde hace tiempo ha dejado de confiar en la gestoría de la agrupación creada por Lázaro Cárdenas, porque, desde hace tiempo, los gobiernos de Acción Nacional encontraron la forma de minimizar los gritos y sombrerazos de aquellos que, en su momento mostraron cierto liderazgo.

Centros de acopio, despepites, maquinaria y otros tipos de apoyos terminaron con manifestaciones, plantones, aun cuando algunos de los beneficiarios se han convertido en “la mano que mece la cuna” y ahora buscan la protección, utilizando sus habilidades de mimetismo, en el nuevo régimen de Andrés Manuel Lopez Obrador.

Estos individuos carentes de principios y de ética, dan la espalda y se olvidan de la cola que arrastran, tienen la mentira a flor de labio, al igual que las reflexiones, las oraciones, las citas y los consejos religiosos, pero se mueven bajo el agua, procurando no ser vistos o identificados.

Regresando a los delegados con funciones de presidente, en el caso de Baja California, la elección de los nuevos directivos de la Liga de Comunidades Agrarias y de sus comités municipales, el proceso seguirá “en chino”, porque hasta el momento no ha existido claridad, no haya reglas del juego y el enviado del CEN de la CNC no ha dado a conocer las bases de la convocatoria.

Insistimos, la CNC está siendo utilizada por su presidente – no líder- nacional, el senado Hernández Deras, como instrumento de presión, reclamando al Partido Revolucionarios Institucional la fortaleza como tercer pilar de ese averiado instituto político.  

Por lo pronto, en Baja California, el Revolucionario Institucional ha ignorado, no solo a la CNC, también a la CCI, a la Federación Estatal de Propietarios Rurales y a la Unión Agrícola Regional en sus candidaturas a diputados, salvo la mención del profesor Luis Antonio Rodríguez Díaz, como posible contendiente por el primer distrito local electoral.

Así las cosas, hay que esperar para ver qué sucede.

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