Semanario El Pionero

Expresión de Mexicali y su Valle

El Gobierno debe defender la reforma educativa

La evaluación magisterial no es un capricho impuesto por un puñado de actores que buscan hacer infeliz la vida de los maestros, la evaluación magisterial tiene la finalidad de buscar las áreas de capacitación necesarias para que los maestros puedan desarrollar mejor su labor educativa.

La UNPD -Unión Nacional de Padres de Familia- establece lo anterior en su portal y precisa: Se vuelven a salir con la suya los integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), tras las negociaciones con la Secretaría de Gobernación, se anunció el día de ayer que los profesores separados de su cargo por tener faltas de manera injustificada y por no haber participado en la evaluación magisterial serán restablecidos en sus puestos y además se les pagarán sus salarios retroactivamente, también se descongelarán las cuentas de este sindicato para que por ahí fluyan los pagos a los comisionados.

¿Qué pensarán ahora los maestros que sí se prepararon y cumplieron con la evaluación magisterial? ¿Qué pensarán los maestros que fueron humillados públicamente por cumplir con su obligación? ¿No importa que los niños oaxaqueños pierdan casi la mitad de sus clases por paros, plantones y manifestaciones? ¿Es justo que los estados más pobres y con la calidad educativa más baja sigan recibiendo clases con maestros que no desean actualizarse ni ser evaluados y además faltan a clases constantemente?     

Nada de esto importa, las negociaciones que se dan en la Secretaría de Gobernación son de orden político y la parte educativa no es tomada en cuenta.

Qué frágil es la Reforma Educativa cuando en el papel y solo en el papel existe, cuando no es puesta en práctica para construir un nuevo sistema que nos permita salir de este impresionante bache en el que se encuentra la educación de nuestro país.

Queda demostrado nuevamente que la parte política en México, tiene mucho más importancia que la parte educativa. Esta negociación es una ofensa a la ciudadanía mexicana que tiene la esperanza de tener una mejor educación.

La evaluación magisterial no es un capricho impuesto por un puñado de actores que buscan hacer infeliz la vida de los maestros, la evaluación magisterial tiene la finalidad de buscar las áreas de capacitación necesarias para que los maestros puedan desarrollar mejor su labor educativa.

Lo que sucedió el día de ayer, daña la Reforma Educativa que apenas comienza a dar sus primeros pasos, pues les da excepción a los maestros oaxaqueños ¿con qué argumentos se podrá separar de su cargo a cualquier otro maestro que falte injustificadamente o no presente las evaluaciones magisteriales?

El Gobierno debe decidir ya: el defender la Reforma Educativa o seguir realizando pactos –de los que nadie conoce su contenido– con las secciones sindicales.