Matices: Moches y horas extras

Por  Dianeth Pérez Arreola

Gabino Armenta López es un inspector de alcoholes adscrito a la Secretaría del Ayuntamiento. Hace meses dimos cuenta de sus actividades ofreciendo horas extras a los antros a precio de ganga; si se la compraban al jefe Reséndiz les salían en 4 mil pesos, y si se las compraban a él, en mitad de precio. Si iban directamente al ayuntamiento, el precio era de 9 mil.

Pues bien, Gabino fue sustituído por Erick Javier Villareal Zazueta como jefe de alcoholes. Dicen que empezó muy bien en sepiembre, pero que pronto se le subió el puesto y las ganas de hacer negocio a la cabeza y anda por la libre cobrando horas extras por abajo del agua.

Entre sus clientes me cuentan que está el Tenebroso 1 y 2, el after de El Establo. Y por supuesto que se aprovecha para que lo traten bien en los antros. En una de sus últimas salidas estaba tan borracho que a la hora de pagar le dio su gafete a la mesera creyendo que era su tarjeta bancaria, y aprovechó para tomarle una foto.

“Pedimos piso parejo porque a unos no nos dejan tener horas extras baratas y a otros por unos pesos los dejan hasta las 9 de la mañana… los invitamos a que echen la vuelta en la madrugada en los bares y chequen su cierre, y a su vez chequen recaudación y pregunten cuántas horas extras hay pagadas”, dicen algunos dueños de antros.

Denuncian que a algunos lugares hasta paquete les hacen como a “La Roca”. Mientras tanto a otros los tienen con el pie en el cuello y encima cuando van les piden “atención” o sea todo gratis. Eso sin contar que mientras a unos les exigen guardia de seguridad certificado, en otros bares ni guardias tienen, o les dicen que el que está certificado descansó, o los callan dándoles dinero.

Ahí se la pasamos al Secretario del Ayuntamiento Rodrigo Llantada.

En otro tema, muy alzadito está resultando el acomodado de Carlos Torres en el gobierno municipal de Tijuana, el expanista “Fufo” Guerrero, quien de manera prepotente y grosera regañó al director de Atención al Migrante, José Luis Pérez Canchola, y le pidió la renuncia.

Unos dicen que fue el “Fufo” quien se aventó la declaratoria de emergencia por las deportaciones masivas que pretende Trump por las fronteras mexicanas -acción que no fue del agrado de la presidenta Claudia Sheinbaum-, pero critica a quien sí acudió a atender personalmente a los migrantes, a brindarles información y a procurarles seguridad.

Aunque esto pueda parecer contradictorio, los malpensados aseguran que el recomendado de Torres se relame los bigotes con la declaratoria, pues las situaciones de emergencia -como lo fue la pandemia-, permiten a los gobiernos hacer compras “indispensables” mediante adjudicación directa y sin importar el (sobre)precio.

La encargada de despacho, Nivia Kareli Ruiz Berumen, quien era “asesora en materia de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobierno Municipal”. ¿O sea, asesora del Fufo? ¿Cuántos asesores en otras materias tendrá?

Tremendo susto se sacaron los niños que entrenaban beisbol y sus familias en el estadio Francisco García Soto, en la Río Grijalva y Quinta en Palaco la tarde de hoy, pues se empezaron a escuchar balazos y se tuvieron que resguardar.

El agente municipal Eduardo Solís fue atacado en su unidad con arma de fuego en Rio Hondo y Octava. Lo trasladaron escoltado desde González Ortega para su atención médica, mientras que el auto del presunto responsable fue localizado en Río Suchiate y Segunda.

Las familias están impactadas por sentir tan cerca la inseguridad, mientras tanto la reputación de la policía va de mal en peor, pues trascendieron videos de un hombre privado de la libertad que hace acusaciones contra la corporación, y hoy quedó en evidencia la presunta extorsión a una turista estadounidense a la que policías municipales pidieron 2 mil pesos por dejarla ir.

No sabemos si Marina del Pilar, en cumplimiento al gabinete paritario -compromiso de la presidenta Sheinbaum-, colocará a Mónica Vega en la Secretaría General de Gobierno, o los detractores del funcionario más cascarrabias solo quieren hacerlo enojar.

Lo cierto es que se habla desde hace tiempo de la posibilidad de la salida de los dos grandes pilares de la gober, Marco Moreno Mexía, y Alfredo Álvarez. Pero no por cumplir con la paridad, sino porque el primero ya quiere irse y el segundo no está conteniendo los temas como esperaba la mandataria.

Lo cierto es que la mayoría son hombres en el gabinete, así que para hacerle caso a la presidenta muchos tendrán que irse y dejarle su silla a una mujer. A ver si no se avientan el truco de meter como parte del gabinete a todas las oficinas de gobierno y así jugar al 50-50 haciendo cambios solo en las dependencias menores.