Semanario El Pionero

Expresión de Mexicali y su Valle

México el País de las REFORMAS

Por Antonio Magaña.

Cuando Sancho Panza iba a gobernar la Ínsula Barataria, Don Quijote le recomendó algo así, como, ‘pocas leyes, Sancho, pero que se cumplan’.

En México vivimos el tiempo de los derechos en el papel. 

Para la presidente, todo se volvió un derecho: “derecho al agua, derecho a la educación, derecho a la salud…”.

Un día de estos, va a pedir que se incluya en la constitución el derecho a respirar, a la felicidad, a sonreír… 

De lo que no habla esta señora, es de nuestro derecho a vivir seguros, ni de su obligación de garantizar la paz y tranquilidad de los mexicanos…

Derechos, derechos…

El acceso a la cantidad de agua potable, para satisfacer las necesidades de la vida diaria, ya es un derecho… 

Todos los mexicanos tenemos derecho a recibir educación: laica, gratuita, obligatoria y… de calidad.

Hablan mucho del derecho a la salud; incluso, en 2025, vendrá una reforma constitucional que obligará al Estado a garantizar la atención médica integral, universal y gratuita ¿Y?

Para garantizar ese derecho, se necesita invertir más, en lugar de recortar el presupuesto al sector salud.

Ayer, el otrora “pasquín inmundo”, REFORMA, publicó: 

“Cada 15 horas Morena y sus aliados aprobaron una reforma constitucional…sumaron 16 modificaciones a la carga magna en 40 sesiones del Congreso para rehacer la Constitución del país”.

Hicieron ‘pomada’ el Poder Judicial; el último dique que contenía los desvaríos de la 4T.

Desaparecieron 7 organismo autónomos que vigilaban las políticas públicas, la competencia económica, la transparencia y el ejercicio efectivo del gobierno.

Regresaron PEMEX y CFE a su condición de empresas -públicas- del Estado, sin salvar sus crisis financieras.

Elevaron a rango constitucional los programas sociales. 

Están pendientes «la reforma electoral» que desaparece al INE y creará el Instituto Nacional de Elecciones y Consultas INEC; con esa reforma, se eliminarán los diputados y senadores plurinominales, desterrando así a las minorías en los congresos.

También falta, elevar a rango constitucional, la prohibición de la siembra de maíz transgénico. 

Ayer, la presidente, se aventó una muy buena: “Es México el país más democrático”; lo anterior porque, en 2025, se van a elegir jueces y magistrados… da risa tanta tontería…

De verdad creen que, con esas reformas, México será un mejor lugar para vivir; acaso creen que, con las reformas, per se, seremos un país más democrático, más seguro, más competitivo, más rico, con menor pobreza, con un mejor sistema educativo, con un mejor sistema de salud, con más y mejores empleos, con gobernantes honrados; sin tanto corrupto, ratero e incompetente en el gobierno…

Ni los reformistas se lo creen…

Lo único cierto es que, las nuevas leyes, solo favorecen a quienes hoy detentan el poder, para que sigan mandando y robando a sus anchas.

Piensan que gobernarán para siempre…