Semanario El Pionero

Expresión de Mexicali y su Valle

Lo extraordinario de lo cotidiano…

Casi un arte

Por Gladys Villaloboz*

“La gratitud no solo es la más grande de las virtudes, sino que engendra todas las demás” Marco Tulio Cicerón, filósofo romano.

Hemos iniciado un nuevo ciclo, un nuevo año, el 2025. Lo único que viene a mi mente hoy: la gratitud. En muchos hogares nos reunimos familias, amigos, conocidos, seres queridos. En un ambiente festivo, celebramos la llegada de un nuevo año. A la par, celebramos nuestra existencia, la oportunidad de seguir presentes en esta aventura llamada vida.

Ta vez hicimos algún ritual tradicional, alguno individual, alguno de nuestra tradición familiar. Tal vez acompañamos la media noche con un recuento del año que acaba de concluir, una reflexión, un momento de introspección.

“El sentimiento de gratitud no corresponde a una de las emociones básicas. Todo lo contrario. A diferencia de otros sentimientos, el de la gratitud no aparece como un impulso simplemente. La gratitud exige que haya un sistema de valores éticos, en donde estén resueltos los conceptos de dar y recibir, además de una renuncia a la visión egocéntrica de la vida” nos dice la periodista colombiana Edith Sánchez en el portal “La mente es maravillosa”

“La gratitud es un sentimiento sutil y sofisticado. Casi un arte. La gratitud germina sobre la convicción de que los seres humanos somos incompletos y que nos necesitamos mutuamente. Es el producto de haber desarrollado una ética de cooperación, en lugar de una actitud de competencia o confrontación.

Los agradecidos son también personas que difícilmente dan cabida a sentimientos negativos como el resentimiento y la envidia. Son capaces de sentir gratitud, precisamente porque eligen ver lo mejor de las personas y guardarlo en la memoria.

También son más generosos. Reconocen que la ayuda mutua es un valor importante y por eso no solamente son capaces de apreciar la ayuda que reciben, sino que también están dispuestos a ayudar a otros. Por eso no todos saben agradecer y es que es una virtud que solamente tienen los mejores”, concluye.

Para ser verdaderamente agradecido debemos estar en el presente. Párate y observa. Respira profundamente. Aquí y ahora. A menudo olvidamos que el mayor milagro no es caminar sobre el agua. El milagro más grande es abrir los ojos, apreciar el momento presente y sentirse completamente vivo. 

Tu ¿cómo vives la gratitud? Que 2025 sea todo lo que tu corazón anhela y que la vida te sorprenda amablemente.

 “Lo Extraordinario de lo Cotidiano”, un espacio donde cada día es un motivo. A ti que me lees, valoro tu tiempo. 

*Cachanilla de nacimiento, comunicóloga de profesión, amante del cuerpo por vocación. Crecí análoga, me convertí digital. Asesora en Comunicación, Redactora de Contenidos, Fotógrafa. Mi sitio: gladysvillalobos.wordpress.com/