Entre Los Surcos…

¿Engañados o cómplices? los de la 4T

Por César Villalobos López

A nivel nacional, el dejar que las cosas ocurran y luego las justifiquen con el respeto a los derechos humanos, o que los delincuentes tienen padres y abuelos, son el pan de cada día, por parte de Andrés Manuel Lopez Obrador, electo presidente de México en el 2018.

En aquel momento, una buena parte del pueblo de México estaba, igual que ahora, harto del poco avance el país, de la corrupción, magnificada por Lopez Obrador como candidato que se pronunciaba por combatirla.

En la actualidad, los mexicanos estamos hartos de la corrupción magnificada en el gobierno del cambio, el de la 4T, con Lopez Obrador al frente, pero además del desmantelamiento de las instituciones construidas a lo largo de los años por los gobiernos del PRI y del PAN, para no irnos más atrás.

Una buena parte de la población de clase media y estudios, es odiada por el jefe del ejecutivo, bajo el argumento de estar en contra el él, por el solo hecho de no estar de acuerdo con lo que piensa, dice o hace.

El constante ataque a comunicadores y medios de comunicación, así como la serie de mentiras que emite a través de sus conferencias mañaneras han generado, contra ellos, una reacción adversa entre los que todavía no se han dado cuenta del a daño que AMLO ha hecho al país.   

El presidente no ve, no se da cuenta, o no le importan, los efectos negativos que la delincuencia, en todos sus géneros o modalidades, causan en la tranquilidad y en la economía, no solo de empresarios, sino de todas las clases sociales, incluyendo en aquellos que le adoran.

El Ejercito Nacional, una institución fuerte y respetable se ha convertido en juguete de cualquier tipo de agresión, debido a que el jefe supremo de las fuerzas armadas les ordeno, abrazos, no balazos.

Aquella fortaleza ahora es debilidad por la degradación de los individuos que, por disciplina tienen que soportar las vejaciones de cualquier grupo de inconformes o delincuentes.

A nivel municipal, la alcaldesa Norma Alicia Bustamante Martínez hace lo mismo solapando a individuos agresores sexuales de mujeres, o pretendiendo tapar el sol con un dedo en el accidente que ha obscurecido las Fiestas del Sol.