Los Barones Tecnológicos de Plataformas

Por Rosa Chávez Cárdenas 

El gobierno del presidente Biden y la presidenta de la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos Lina Khan están decididos a cambiar el enfoque en la legislación aplicable a la competencia, seguir en la lucha y aplicar la ley antimonopolio de 1914. Están preocupados y ocupados por los monopolios de las grandes empresas como Amazon, Google y Meta, les llaman los “barones ladrones” estos se han apropiado de la economía y la política. Han aprovechado las vías de comunicación sin invertir como lo hicieron cuando construyeron las vías del ferrocarril, las carreteras, el teléfono, proceso que llevó muchos años y grandes costos. Lo que sorprende es como estos gigantes tecnológicos se apropiaron de la economía al implementar nuevas tácticas contrarias a la competencia, engañosas e injustas con la velocidad de un sistema digital. Para el gobierno de Estados Unidos Amazon es un monopolio, para crecer utilizó subsidios a los usuarios finales y condiciones favorables a sus clientes. Aprovechó su flexibilidad digital para atrapar a los clientes. El negocio se convirtió en un imperio minorista sin trabas para la competencia y la regulación, elevan los precios de marcas poco conocidas y las envuelven con indicaciones falsas. Los productos de China los compran a precios muy por abajo del costo de producción en otros países, resultan desechables por ser de baja calidad.

Las plataformas crecieron por la cultura desechable y consumista en la que estamos inmersos. La novedad de comprar en línea se ha vuelto una adicción y creció en la pandemia; no necesitan salir al centro comercial, de un día para otro llega el producto a casa. Mi vecina viuda con buena pensión y unas rentas, recibe en promedio unos 10, 15 paquetes todos los días, hasta las frutas y la comida preparada.

Amazon es un depredador de la era de las plataformas, para incrementar la adicción a las compras vendió a sus clientes suscripciones y un año de envíos pagados por anticipado, así construyó una base cautiva. En cuanto a los libros implementó tecnología de leyes de derechos de autor desconocidas para impedir que ofrecieran los libros a otras plataformas y liberó a las empresas de la logística para el surtido de pedidos. Efectuó enormes subsidios acompañados por los inversionistas que respaldan el monopolio, resulta difícil para los minoristas poder competir. Su rival en las ventas son Target, Mercado Libre y Walmart que ha implementado envíos a domicilio que llegan en unas horas. No importa perder al inicio, venden bienes por debajo de su costo para acabar con cualquier empresa que por ingenuos quieren competir con el monstruo. José un paciente me trajo a su hijo, se la pasaba haciendo compras con la tarjeta de su papá, hasta que le llamaron del banco para decirle que no tenía dinero en su cuenta, José sorprendido dijo que alguien le había robado. El funcionario del banco le respondió “Ya investigamos las compras se hacen de su casa a las 11 de la noche” El hijo resultó el ladrón de su padre.

Los trabajadores sufren, es normal que soporten lesiones graves, los empleados no tienen tiempo ni de acudir al baño, en los almacenes orinan en botellas para no perder el tiempo, tienen que cumplir las exigencias de rapidez en el surtido de pedidos. Amazon es pionero del megaciclo, un turno nocturno obligatorio de 10 horas y media en sus almacenes. Los que cuentan con camionetas de entregas y los conductores con uniformes se ven forzados al servicio y corren el riesgo de que su contrato se de por terminado en cualquier momento.  El gobierno de Biden y la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos quieren acabar con las leyes del monopolio, situación que no vemos que suceda en México. 

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