Sin organización y con intromisión política en el agro de Baja California

• Justo el reclamo de mejores precios a cosechas
• El gobierno de la 4T les abandonó a su suerte
• Productores compiten con homólogos apoyados
• Los productores deben ajustarse a costos reales
• Sin organización difícil reducir costo del cultivo
• Agricultores aspiracionista “mamando y dando topes”
• Alcaldesa da alas al disidente del Sistema Producto

Por César Villalobos López    

MEXICALI. – La manipulación de intereses políticos más la suma de los efectos negativos de una política de abandono del gobierno de la 4T a la agricultura de alto rendimiento y la resistencia de los agricultores a la organización, dieron como resultado el conflicto económico que viven productores de trigo del Valle de Mexicali.

Debemos de aclarar que, si bien todos aspiran a un mejor ingreso, no todos los trigueros se encuentran en la misma situación y participaron en los plantones apoyando a los que se encuentran en problemas, no solo de precio, sino de baja calidad y rendimientos por debajo de la media.

La organización ha sido un tabú entre una buen a arte de los productores – ahora con problemas- debido a que luego surgen aquellos que pretenden enarbolar banderas o encabezar directivas, ya sea por aspiraciones económicas o ambiciones políticas, mas no productivas.

Aquí existen agricultores aspiracioncitas que -con todo derecho- incursionan en la agroindustria, o se con vierten en intermediarios –“coyotes” les llama el presidente Andrés Manuel López Obrador- operando centros de acopio de trigo y especulan con la cosecha de sus homólogos, al comercializar, pero, además, en ocasiones jinetean el producto de la venta, retrasando el pago.

Resulta inverosímil el observar aspiracioncitas, en las manifestaciones y bloqueos, despotricando, al igual que aquellos aparentes cabezas del movimiento, con rayos y centellas en contra de los entes gubernamentales, desde los titulares de los poderes ejecutivos de la federación y del estado, así como de los empresarios, compradores de las cosechas.

Pero no solo eso, la desesperación, porque el negocio no se vislumbra positivo, como en años anteriores, los ha llevado, junto con los mal llamados “lideres”, a continuar insultando, a exigir y hasta a amenazar porque no se les cumplen sus caprichos o satisfacen sus necesidades de comercialización.

Cuando se cambian la cachucha, ya como empresarios aspiracioncitas, se enfrentan a la realidad y se dan cuenta que, en la comercialización de cualquier producto, no se puede exigir u obligar a que te compren al precio que tu quieres o te acepten un producto que no cumple con normas de calidad.

Y eso es lo que ha venido ocurriendo por ambiciones políticas y fallidas negociaciones, en lo obscurito, de cuatro individuos asumiendo la representatividad de los trigueros del valle de Mexicali, cuando la realidad el beneficio está dirigido a una empresa de aspiracioncitas.

Este grupo surgió de la disidencia del Sistema Producto Trigo, cuando el, o los intereses políticos del tesorero, Horacio Gómez Carraza, de sus promotores, de sus seguidores y el interés económico de Gaby Machado, agricultor aspiracioncita y empresario, manteniendo el plantón en el Centro Cívico.

Ricardo Muñoz y María Lorenza “Cory” López Ruiz, presidente y tesorera del Sistema Producto, con una gran mayoría de productores de trigo se retiraron del Centro Cívico y se plantaron en el acceso a La Moderna, a manera de protesta, sin obstruir el paso de vehículos y vigilando el cumplimiento de los acuerdos tomados en diferentes reuniones con la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda. 

Hemos buscado el sustento del número mágico de 8 mil pesos por tonelada y no lo encontramos, se tienen varios esquemas sobre el costo de producción por hectárea, algunos incluyendo la renta de la tierra, lo que obligaría al agricultor a elevar sus rendimientos, con buenas prácticas en el desarrollo de la planta, fertilización, riego y combate de plagas, enfermedades y malezas.

Gómez Carranza, Gaby Machado y otros productores participaron, en Cajeme y en la Ciudad de México, en reuniones con productores de 22 estados de la república, sin haber logrado ningún resultado positivo para sus representados. 

La frustración de estos y de sus jilgueros fue tanta, junto con la soberbia, que pretendían que la gobernadora bajara al plantón y les preguntara como les había ido, en las mencionadas reuniones.

Las dos cabezas del Sistema Producto Trigo han estado negociando con las empresas las inconformidades de los productores, lamentablemente en ocasiones solo son por dichos, sin la presencia del interesado, solo por los dichos.

La queja generalizada, además del no pronto pago en algunos centros de acopio de las empresas agroindustriales y del aspiracionista, el reclamo es por el rechazo del trigo con altos porcentajes de “panza blanca” que, según los expertos, es consecuencia de una deficiente fertilización que le hace perder proteína, por lo que su precio sufre una baja considerable, 

La empresa del productor aspiracionista esta protegida en sus contratos para rechazar trigo con “pansa blanca” y en el caso de trigos de buena calidad, si el agricultor recibió avío de PAMSA y no quiere venderle a la empresa de todos modos esta obligado a entregar su cosecha, con lo que la empresa gana por el manejo, aunque el comprador sea otra empresa.       

Para finalizar no podemos dejar fuera la ignorancia de la alcaldesa Norma Alicia Bustamante Martínez, o tal vez su protagonismo político, dando calor al grupo de Horacio Gómez Carranza, de mutuo propio o atendiendo la recomendación del grupo político de Jaime Bonilla Valdez, mencionado en varias ocasiones entre los integrantes del plantón. 

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