Entre Los Surcos…

Organización, coco de los agricultores

Por César Villalobos López

En varias ocasiones, más bien en muchas, hemos escrito sobre uno de los principales problemas de los productores agrícolas, la desorganización, y su resistencia a la organización. 

Aludimos la resistencia de la gran mayoría de los hombres del campo, a la organización económica para estar en condiciones de ser parte de las cadenas de valor y no solo un proveedor de materia prima, porque ignoran o soslayan todo tipo de recomendaciones al respecto.

Esto lo observamos el pasado jueves, en el Foro Regional “Hacia una nueva política alimentaria”, durante las múltiples intervenciones de Félix Hernández Gamundi, moderador de los trabajos y en el mensaje de Cuauhtémoc Cárdenas Solorzano.

Hernández Gamundi, en respuesta a las reiteradas quejas sobre bajos precios de las cosechas, altos costos de producción y voracidad habilitadores e industriales compradores, llamó a la organización.

Lamentable, muy lamentable, el engaño, a Cuauhtémoc Cárdenas Solorzano, durante algunas presentaciones de panelistas, identificándoles como productores y exportadores, tratando de elevar el nivel de los planteamientos.

En realidad, los panelistas mencionados como exportadores, nunca han exportado, aun cuando si han vendido cosechas para que los empresarios exporten. 

El mejor ejemplo de la desorganización se tiene en la división del Sistema Producto Trigo debido a protagonismos personales, ambiciones e intereses políticos de personajes que tiran la piedra esconden la mano.  

No vamos a definir cual de los dos grupos tiene la razón, pero lo que sí es innegable es que, bien o mal, la fracción de Francisco Muñoz y Cory López, presidente y secretaria del Comité, ha estado negociando conflictos de trigueros con los compradores.

Horacio Gómez Carranza, tesorero del Comité, con un reducido numero de productores y simpatizantes, si bien ha sido protagónico en Cajeme y la conferencia de prensa den la Ciudad de México, no ha generado ningún beneficio adicional para sus representados.

Gómez Carranza está siendo utilizado como punta de flecha y considera que, hostigando a la gobernadora Marina del Pilar Avila Olmeda, con la presencia de un mayor número de maquinaria para bloquear todo el centro cívico, pero no ha tenido la respuesta de los trigueros para lograr su objetivo.  

En determinados momentos se han tenido conatos de golpes entre los pocos manifestantes y para justificarse aseguran que son provocadores enviados para provocarlos. 

Pero el mismo Gómez Carranza ha externado su enfado, su cansancio a dos meses del improductivo plantón.

No se debe de olvidar que el enfado, el cansancio y el alcohol, en cualquiera de sus presentaciones, son malos consejeros, exaltan los ánimos y la violencia.

Regresando al Foro, donde la organización semejo a un festejo escolar de fin de cursos, con alrededor de un centenar de agricultores, algunos ponderando los antecedentes políticos de Cárdenas Solorzano, con la ilusión de lograr algún avance en la solución de sus problemas.

Se desconoce el verdadero interés del hijo de Tata Lázaro, en este tipo de foros, invirtiendo tiempo y con su presencia dando esperanza a los productores que hace 5 años depositaban su fe y confianza en Andrés Manuel López Obrador, abrazando la ahora repudiada 4T.    

Cuauhtémoc fue invitado y accedió a visitar el plantón de trigueros en el centro cívico y posiblemente haya observado el desolado panorama que, sin duda se le debió de haber dado alguna explicación justificativa, aprovechándose su presencia para la foto. 

Insistimos en la urgente necesidad de que los agricultores, en especial los trigueros, entiendan que deben de atender el importante llamado de Hernández Gamundi para organizarse, pese a que se tengan amargas experiencias en cooperativas.

Ya es tiempo que los iluminados del campo, sin producir, tengan participación y cabida en foros como el del Módulo 8, o se les permita intervenir en reuniones de productores que si cultivan la tierra, opinando sin sustento, donde se tienen que tomar acuerdos serios, al margen de la política.