Entre Los Surcos…

Acuerdos cupulares

Por César Villalobos López

El problema del abasto de productos alimenticios, especialmente los de la canasta básica, es que, los programas del gobierno de la 4T, son de tipo asistencial, disfrazados de productivos.

En su mayoría están dirigidos para beneficiar a quienes, por la superficie de tierra, solo pueden producir para su consumo interno, de autosuficiencia, pero solo eso.

Se tienen antecedentes de la inoperancia de esos programas, no solo por lo improductivo, sino que los participantes en caído en la corrupción, al comercializar los insumos que reciben, como en el caso de los fertilizantes.      

Pero eso no es solo producto de la necesidad de aquellos que los reciben, sino de la voracidad y complicidad de los funcionarios de la 4T, teniéndose el mejor ejemplo en la operación de Segalmex.

Aun cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador no lo ha querido reconocer, el programa sembrando vida, está siendo un barril sin fondo que, al final, dejará tierras sin vegetación porque es mayor la superficie desbastada para las nuevas plantaciones que se quedaron en proyecto.

Los productores de granos alimenticios con tierras de alto rendimiento han sido satanizados por el gobierno de la 4T y marginados de todo tipo de apoyo.

Al mismo tiempo, la fuga de divisas por la compra de millones de toneladas de granos y otros alimentos crece día con día, situación que soslayan los funcionarios de todos los niveles.

A nivel estatal, en Baja California, no existe ningún proyecto viable y se da impulso a programas y acciones que, desde el paso del titular de la Secretaría del Campo, por la Comisión de Agricultura del Congreso estatal, le resultaron un fracaso.    

Pero tal parece que los políticos metidos a funcionarios prefieren escuchar el halago de quienes les dicen que todo esta bien, a cambio de prebendas, en lugar de hacer una evaluación seria de los resultados de los programas que impulsaron y constar que fueron un fracaso, como productivos, tal vez con éxito político. 

A nivel de Sader, todos los días una serie de reuniones y acuerdos cupulares de los cuales se carece de información local, porque los delegados son mera figura decorativa y están dejando pasar el tiempo para la jubilación.

De paso, en el valle de Mexicali, la ausencia de liderazgos auténticos, pero la sobra de aspirantes a políticos que se autonombran y sorprenden, no la buena fe, la ignorancia de los funcionarios, pretenden hacer su agosto.

Les apetece la nomina oficial o ya de perdida la posibilidad de ser candidato para accesar a las prerrogativas, si los voraces directivos de partidos les participan de algo.