Semanario El Pionero

Expresión de Mexicali y su Valle

Entre Los Surcos…

En el campo, río revuelto

Por César Villalobos López

Resulta lamentable el observar cómo profesionistas de distintas ramas están utilizando las siglas -porque solo son eso, sin membresía- de las agrupaciones que alguna vez fueron bastiones para que los ejidatarios, los colonos y los propietarios rurales buscaran soluciones a sus múltiples problemas, para fines muy personales.

Esos fines pueden ser de distinta índole, tanto políticos, como la búsqueda de como incrustarse en las nóminas oficiales, sin importar hasta donde pueda llegar su sumisión, no hay ética, menos consciencia de la clase que dicen representar.

 Hemos revisado cuidadosamente el historial y los antecedentes de producción de quienes dicen ser representantes de ejidatarios, de colonos y de propietarios rurales, encontrando que la mayoría, por no decir que todos, nada tienen que ver con la producción agrícola o ganadera.  

Sin embargo, hay quienes probaron las mieles del erario público y de seguro no teniendo la capacidad para el desarrollo de sus actividades profesionales que les generen ingresos, buscan marionetas de la comunicación para que les hagan el caldo gordo y mencionen de ellos cualidades que no tienen.

En la cuestión del campo, desconocemos si la gobernadora Marina del Pilar Avila Olmedo tenga alguna idea de lo que se requiere para impulsarlo, pero creemos que ella cree lo que le dicen que hacen y le aseguran que esta bien, al tiempo que le aplauden todas sus ocurrencias.

Marina, junto con el senador José Narro Cespedes, desde tiempos de campaña concibieron dar vida a una agrupación morenista, así como Javier Bernardo Usabiaga Arroyo, siendo secretario de Agricultura, pretendió dar vida a una agrupación panista para el campo mexicano.

A los panistas les salió el tiro por la culata debido a que, al igual que ahora, los recursos al campo no fluyeron y los representantes o supuestos directivos, no hicieron el trabajo de campo, precisamente por falta de dinero.

Ahora, todo parece que será distinto con Rigoberto Campos González, también adepto a la publicidad y aun cuando no tiene experiencia en el cultivo de la tierra, por obra y gracia de algunos simpatizantes es ejidatario y usuarios del agua en el Distrito de Riego 014 del valle de Mexicali.

Rigo le lleva caballo al arquitecto Humberto López Barraza, quien se ostenta como presidente de la Liga de Comunidades Agrarias, con Francisco Porras Medrano, como único apoyo y ambos promocionan establecer un seguro, pero están igual que Jaime Bonilla con la fotovoltaica, no tienen las autorizaciones oficiales.

Aseguran que a través del Fogabac les autorizaran crédito para tractores usados, seguramente recordando que en el pasado panista simularon compras con solo pintar los tractores viejos y presentar una factura, seguramente apócrifa.

Otro de los dizques promotores en la busca de soluciones, con el apoyo de la senadora Alejandra León, es el Lic. Rubén Camacho quien pretendió ser presidente del modulo 12, donde es usuario y tuvo el rechazo de sus compañeros, pero esta interesado en una reunión, buscando liderazgo-

Y que podemos decir del Lic. Enrique Sánchez León, con antecedentes de militancia en Morena, preside una agrupación apolítica, la Unión Agrícola Regional, pretendió llegar a la diputación del primer distrito en la pasada legislatura, llegando solo a suplente del arquitecto Juan Melendrez Espinoza y cobró dos o tres meses en la nómina del Congreso.     

Ha tomado como cantaleta el asunto del trigo, presumiendo que el grano del valle de Mexicali es el mejor del mundo, quejándose de que no se les paga el precio justo y del alza de los insumos, en especial fertilizantes, agroquímicos y combustibles, pero cuando estuvo en el congreso se la llevo haciendo castillos en el aire y nada concreto a favor de los productores.

Hasta ahí la dejamos por ahora.