Editorial…

Gas para el bienestar

El presidente Andrés Manuel Lopez Obrador anuncio su intención de crear una nueva empresa paraestatal que operaria bajo el control de Pemex, bajo el nombre de Gas Bienestar, cuyo objetivo principal es atender las quejas sobre el incremento en el precio de ese combustible.

Por lo del control de la empresa Gas Butano, por parte de Pemex, se puede considerar que esta entregando gallinas al coyote para su cuidado, a juzgar por las constantes y enormes perdidas que Pemex acumula año con año, inclusive en la administración de la 4T.

De acuerdo con información publicada por la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y en la primera quincena de mayo de este año se vendió en el país a un precio promedio de 12.7 pesos por litro, en el mismo periodo del año pasado este se comercializaba en 9.54 pesos.

“No se ve que sea una medida positiva.

Atenta contra la libre competencia porque esto va a desincentivar la inversión fija en el sector y genera distorsiones en el precio”.                                                                                                  

Un experto en materia económica del sector energético, señaló que para que Gas Bienestar pueda incidir en una baja en los precios del gas LP en el país es necesario que tenga al menos un 70% de participación de mercado.

De acuerdo a cifras de la secretaría de Energía, para llegar a ese porcentaje, la nueva empresa debería tener en promedio 8.4 millones de pipas-camiones para distribuir gas LP a tanques estacionarios, y al menos 14 millones de camiones para transportar y distribuir el gas en cilindros.                                        Para la creación de esta empresa se necesita de entrada una planta de distribución, una oficina administrativa, pago de nóminas a operadores y una vasta flota de camiones que debe renovarse cada cuatro o cinco años.

“El 70% del gas que se consume en México es importado desde Estados Unidos, por lo que el costo no va a depender del gobierno. Esto significa que vender el gas a los usuarios finales por debajo del precio de mercado va a implicar un tipo de subsidio, es decir, se tendrán que utilizar subsidios de lasw finanzas públicas, lo cual tiene un costo de oportunidad. Este subsidio será pagado por las finanzas públicas, es decir, será pagado por los ciudadanos”.