Los habitantes de Aguililla insisten, para que llegue la paz, en la visita del presidente López Obrador, señaló el párroco Gilberto Vergara
El padre Gilberto Vergara, párroco de Aguililla, llamó al presidente Andrés Manuel López Obrador a cumplir su “palabra de honor” y visitar el municipio michoacano asediado por el crimen organizado.
En entrevista con Joaquín López-Dóriga para Radio Fórmula el sacerdote enfatizó que los habitantes de Aguililla insisten en que el presidente López Obrador los visite para que sean atendidas sus demandas de seguridad.
Criticó que el primer mandatario se excuse en no querer hacer el “caldo gordo” a la prensa y los adversarios para no visitar el municipio.
“Yo creo que el pretexto de los medios de comunicación, que malinterpreten esto, no puede ser lo que dirija una agenda de un mandatario (…)
Yo no creo que esa pueda ser la causa para dejar a un pueblo que pide su visita, que lo invita, que le abre los brazos, y sobre todo al cual él le había prometido (la visita), que nos deje así esperando, solamente por decir que no quiere hacerles el caldo gordo a los periodistas.”
En caso de no querer ser visto en su visita a Aguililla, propuso el párroco Gilberto Vergara, podría organizarse un encuentro privado.
Cuestionado sobre la reunión con autoridades federales, el sacerdote destacó que acudieron funcionarios de las secretarías de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) y de Gobernación (Segob), así como de la Secretaría de Gobierno de Michoacán.
El encuentro, detalló, duró alrededor de cuatro horas durante las cuales se expresaron las necesidades del pueblo de Aguililla y se lograron “acuerdos buenos” al entregarse un pliego petitorio.
“En primer lugar tiene que venir la cuestión del camino, de la seguridad; que nos garanticen vivir en paz para poder prosperar. Ya los programas de Gobierno son en segundo lugar”, expuso.
El párroco Gilberto Vergara detalló que entre lo acordado está que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) garantice el paso libre y seguro por la carretera a Aguililla, en un primer momento, en horario diurno.
También se pactó que ganaderos puedan sacar sus animales y los productores sus productos sin el temor de ser víctimas de represalias por parte de grupos rivales.
“Nosotros solo estamos pidiendo el derecho que nos corresponde. Ya la lucha entre cárteles y la lucha del Gobierno contra ellos es aparte”, manifestó.
Los habitantes de Aguililla también exigieron la plena identificación de elementos al servicio de la 43 Zona Militar para evitar infiltrados de cárteles.
El padre Gilberto Vergara concluyó que es correcto el llamado del presidente López Obrador de “abrazos y no balazos en Aguililla”.
“Nosotros estamos dispuestos a dar abrazos, nada más que les diga a los que traen armas que no nos tiren balazos”, destacó.
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