Semanario El Pionero

Expresión de Mexicali y su Valle

Editorial…

Combate a corrupción: “Cuento chino”

Dice el refrán que “las cosas se ven según el cristal con que se miren” y hay quienes tienen la impresión de que, en el “éxito” adjudicado a las “jornadas contra la corrupción”, sucede lo mismo, toda vez que las explicaciones y los buenos deseos de quienes imparten platicas o conferencias promovidas por la Secretaria de la Contraloría y Transparencia Gubernamental, no son atendidas por todos los funcionarios que manejan o dispersan recursos públicos. 

La información oficial sobre la 2da Jornada Contra la Corrupción en los municipios de Mexicali, Ensenada y Tijuana, indica que el titular de la SGTG, Francisco Postlethwaite Duhagón, expreso “si en realidad queremos combatir la corrupción tenemos que tomar en serio lo aquí visto y exigir mayor profesionalismo, el cual implica entre otros requisitos, la integridad de nuestros servidores públicos desde los mandos superiores hacia abajo. Si bien México necesita nuevas prácticas, únicamente se lograrán con políticas públicas bien diseñadas y ejecutadas, que se traduzcan en una nueva forma de ser y hacer las cosas, que produzcan mejores resultados dentro del servicio público, y por ende una mejor gobernanza”.

En la segunda jornada contra la Corrupción que, “culminó con éxito y fuerza en el CEART del municipio de Tijuana”, el funcionario estatal agradeció la valiosa asistencia y participación de los presentes durante los tres días de trabajo en los diversos municipios del Estado.

Se dijo que este tipo de jornadas se realizan “con el claro objetivo de combatir la corrupción pública, si bien primero se debe saber con claridad cuáles son los actos constitutivos de la misma, ello para no caer en las generalizaciones, pues habitualmente los ciudadanos suelen tener como corrupción, por igual, a un acto de ineficiencia administrativa que, a un peculado”, concluyó Postlethwaite Duhagón.

Lo que soslaya el funcionario es que la corrupción se da por omisión, por deshonestidad, por complicidad o por la distracción o desvió de recursos del erario, situación que ha venido ocurriendo en programas de apoyo al sector primario donde se manejan recursos federales o de concurrencia.