Semanario El Pionero

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Rechazo a bloqueos

“Quien atenta contra instituciones públicas atenta contra la sociedad que lucha por su sostenimiento y funcionamiento óptimos”, afirmó Bernardo H. Martínez Aguirre, ex Secretario General de Gobierno en la administración del gobernador Eugenio Elorduy Walther y actual presidente del Consejo de Desarrollo Económico de Mexicali (CDEM).

Martínez Aguirre, se manifestó en contra del bloqueo de instalaciones municipales como lo intentó nuevamente un grupo de manifestantes que, a su decir, representan a la sociedad en general y en el nombre de ésta ha radicalizado su postura frente al gobierno local que encabeza el alcalde Gustavo Sánchez Vázquez, quien en el devenir de protestas contra políticas públicas ha demostrado en palabra y acción tolerancia y privilegio al diálogo para resolver reclamos en el ámbito de sus responsabilidades y facultades.

Añadió: “el CDEM como organismo comunitario integrado por ciudadanos, autoridades y organizaciones que participan en la planeación, desarrollo e impulso de proyectos que mejoren la calidad de vida en la ciudad y el valle, hace su más enérgica protesta contra quienes atentan contra las instituciones públicas, en este caso el gobierno municipal ya que en esa intención se afecta directa e indirectamente el derecho a ser atendido y el interés personal y público de más de un millón de habitantes”.

Martinez Aguirre, al igual que muchos ciudadanos, incluyendo a participantes en las marchas, consideró: “No es afectando a los ciudadanos -que dicen representar- como los manifestantes obtendrán respuestas satisfactorias de las autoridades; por el contrario, una legítima lucha se conduce por la vía legal, institucional, con diálogo fundamentado y objetivo y, de manera muy importante, sin trastocar el estado de derecho que a todos los ciudadanos nos asiste”.

El CDEM apoya la disposición del gobierno municipal para darle continuidad a la mesa de diálogo con manifestantes y rechaza de éstos su actitud virulenta, intolerante e incongruente con que se maneja de manera discrecional, inclusive sin conocimiento y consenso pleno de los cientos de miles de habitantes que dicen representar.