La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) señala que los países deben producir 75 por ciento de los alimentos que consumen para tener seguridad alimentaria, pero México sólo alcanza 55 por ciento.
México, (Notimex).- El representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en México, Crispín Moreira, aseguró que de 2012 a 2017 aumentó en 16 por ciento el aporte del sector agropecuario al Producto Interno Bruto (PIB) primario del país.
Al participar en la presentación del Atlas Agroalimentario 2012-2018, dijo que de acuerdo con datos del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP), este relevante incremento en el PIB primario no solo da cuenta del importante crecimiento del sector agropecuario, sino también de las oportunidades existentes en el campo mexicano.
El funcionario destacó que el organismo mundial está convencido de que México podrá encabezar una agenda agroalimentaria hacia el año 2030, donde se perciba como una nación referente libre de hambre y pobreza.
El gobierno mexicano está trabajando además en la línea de empoderar a la mujer rural e indígena, que son aliadas para reducir la pobreza, mejorar la seguridad y el cuidado de la tierra, argumentó.
imismo el funcionario de la FAO destacó que el organismo mundial está convencido en que el México podrá liderar una agenda agroalimentaria hacia al 2030 donde se perciba como una nación referencia libre de hambre y pobreza.
Mencionó que esta línea de acción gubernamental para el organismo multilateral es fundamental, ya que conforme algunos estudios internos se ha identificado que si las mujeres en las zonas rurales tuvieran el mismo acceso que los hombres a la tierra, la tecnología, los servicios financieros, la educación y los mercados, se podría elevar la producción agrícola y reducir hasta en 150 millones el número de personas hambrientas en el mundo.
En ese tenor, puntualizó, la FAO mantiene una clara apuesta por la transformación de sistemas alimentarios más incluyentes, sostenibles y resilentes a los efectos que ocasiona del cambio climático.
Celebró por ello que el Atlas Agroalimentario ideado por la actual administración federal en México recopile cifras fidedignas, como una base de información mínima que sirva para transformar el sistema agroalimentario del país a la luz de nuevos retos.
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